Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Alrededor de 80 mil hectáreas de maíz, del distrito de riego 025, podrían quedarse sin sembrar por falta de agua para riego, informó Agustín Hernández Cardona, presidente de la Unión Regional Agrícola del Norte del Estado (URAN).
Explicó que durante el ciclo Otoño-Invierno, que está en curso, en ese distrito que abarca los municipios de Valle Hermoso, Río Bravo y Matamoros, se siembran poco más de 200 mil hectáreas, de las que 120 mil son de sorgo.
Sin embargo, detalló, actualmente solamente hay agua para dos riegos, lo cual pone en peligro los cultivos por lo que la única alternativa viable será dejar de sembrar esas 80 mil hectáreas de maíz por el riesgo de siniestro.
Hernández Cardona dijo que la fecha límite para sembrar en el actual ciclo Otoño-Invierno 2016-2017 vence en febrero próximo, por lo que todavía hay esperanzas de que pueda llover y con ello le escurran aguas a las presas y además se genere la humedad necesaria para iniciar las siembras.
“Hay desesperación y preocupación entre los compañeros por la situación que prevalece. Pero también hay mucha molestia contra la Comisión Nacional del Agua (Conagua), porque consideramos que ella tiene mucha culpa de que no haya suficiente agua para riego agrícola en Tamaulipas”, refirió.
Precisó que la Conagua ha sido apática y tolerante en exceso con productores y autoridades del Chihuahua, uno de los estados que se encuentran en la parte alta de la cuenca del río Bravo.
“En Chihuahua se han construido nuevas presas y hay desorden en las concesiones de agua del río Bravo, lo que impide que escurra suficiente líquido hacia Tamaulipas. A eso atribuimos nosotros que no exista agua para el riego en el estado, no tanto porque las lluvias hayan sido escasas”, refirió.
Para agravar la situación, dijo, cada cuatro años México debe pagar un adeudo de agua con Estados Unidos, lo cual se hace con líquido almacenado en las presas “Amistad” y “Falcón”, que es la que le corresponde a Tamaulipas.