WASHINGTON, EU., enero 13 (Notimex)
Millones de residentes de Estados Unidos, desde Texas en el sur, Illinois en el medio oeste y Virginia en el este, empezaron a resentir los primeros efectos de lo que proyectan como la peor tormenta de hielo en los últimos diez años.
Más de medio centenar de reportes de precipitaciones de la peligrosa lluvia congelada, que convierte calles y carreteras en pistas de patinaje, fueron hechos desde estados como Oklahoma e Indiana.
El Servicio Meteorológico clasificó el fenómeno como una “tormenta invernal mayor”, para la mayor parte del centro de Estados Unidos, abarcando hasta el Valle de Ohio durante este fin de semana.
Televisoras locales mostraban imágenes de árboles caídos en algunas ciudades, donde cuadrillas de empresas de electricidad se alistaban para arreglar eventuales problemas en el suministro eléctrico.
La tormenta es producto de una combinación de presiones árticas provenientes de la región de los Grandes Lagos, con un flujo continuo de temperaturas por debajo del punto de congelación.
Para complicar el panorama, un flujo de aire caliente golpeará a la región por encima de la capa de aire frío, lo que genera las condiciones ideales para la lluvia congelada, una de las principales causas de accidentes automovilísticos en la época invernal.
Autoridades meteorológicas mantienen alertas de tormentas de hielo para la zona conocida como el Texas Panhandle, la porción más al norte del estado, hasta la zona sur de Illinois, con advertencias de lluvia congelada al sur de la zona de alerta.
El Servicio Meteorológico pronosticó acumulaciones de hielo superior a dos centímetros en algunas áreas, un nivel suficiente para declarar intransitables las carreteras y provocar desabasto eléctrico.
La tormenta surge después que la costa este de Estados Unidos gozó esta semana temperaturas inusualmente altas para la temporada invernal, casi similares al inicio de la primavera.
“Ahora tenemos un súbito regreso a la realidad de enero”, señaló el Servicio Meteorológico.