diciembre 11, 2024
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enero 16, 2017 | 148 vistas

KANSAS CITY, EU., enero 15 (AP)

Los Steelers no necesitaron llegar a las diagonales. Le’Veon Bell devoró yardas y minutos, mientras que Chris Bowswell impuso un récord de postemporada en la NFL, con seis goles de campo.

Y eso, aunado a una estupenda labor defensiva y a numerosos errores de los Chiefs, bastó para que Pittsburgh superara el domingo 18-16 a Kansas City, con lo que ancló en la final de la Conferencia Americana.

Ahí, buscará revancha ante Nueva Inglaterra. Los Patriots vencieron 27-16 a los Steelers el 23 de octubre. En aquella ocasión, Pittsburgh careció del quarterback Ben Roethlisberger, quien sufría una lesión de rodilla.

“Creo que va a ser un gran duelo”, avizoró Bell. “Dos grandes quarterbacks estarán frente a frente. Serán dos de los mejores equipos en la Conferencia Americana. La próxima semana llegará la hora de saldar cuentas”.

Desde 2001, los Pats y los Steelers se han combinado para ganar nueve títulos de la Americana.

Los Steelers (13-5) debieron sobrevivir a una última amenaza de los Chiefs. Un acarreo de una yarda de Spencer Ware acercó a Kansas City a 18-16.

Los Chiefs habían logrado la conversión de dos puntos para empatar el marcador. Pero los árbitros sancionaron un “holding” del tackle Eric Fisher –primera selección en el draft de 2013.

El siguiente intento de conversión fracasó.

Con 2:43 minutos por jugarse, Justin Gilbert calculó mal su devolución de un despeje y fue derribado en la yarda cinco de Pittsburgh. Roethlisberger completó un pase de siete yardas con Antonio Brown en tercer down y Pittsburgh se agotó el reloj, para hilvanar su novena victoria seguida.

Kansas City no gana en postemporada como local desde 1994. Acumula cinco derrotas seguidas en playoffs.

Tras los puntos conseguidos en los primeros minutos, el encuentro se convirtió en una exhibición de puntería por parte de Boswell, quien convirtió también seis goles de campo en un duelo de la campaña regular, ante Cincinnati.

Bell dio otro espectáculo, al mostrarse paciente hasta explotar los huecos en la defensa local. Rompió su propia marca de la franquicia en postemporada, al correr para 170 yardas.

La semana pasada, en la victoria sobre Miami, había aportado 167.

“Los coaches confían mucho en mí para que haga el trabajo”, explicó Bell acerca de sus 30 acarreos. “Simplemente corro con todo. Encontré los espacios que pude y corrí a toda velocidad.

Pittsburgh se convirtió en el primer equipo que gana un partido de playoffs sin un touchdown desde 2006, cuando Indianápolis lo logró en la ronda divisional de la Americana ante Baltimore. A la postre, aquellos Colts se coronaron en el Super Bowl.

 

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