Héctor González Antonio.-
Un aproximado de 500 mil migrantes mexicanos que enfrentan un proceso legal, privados de su libertad en las cárceles de Estados Unidos o en espera de sentencia en alguna Corte americana, serían los primeros en ser deportados por el presidente Donald Trump.
El presidente de la Federación Casa Tamaulipas radicado en Texas, Román Bock señaló que una vez que tomó protesta el Presidente número 45 de la Unión Americana las expectativas y el temor a ser enviados hacia México se incrementaron por parte de los connacionales radicados allá.
Dijo que de los aproximadamente 2.2 millones o quizás un poco más de personas que se encuentran en penitenciarias, se calcula que entre 400 y 500 mil corresponden a mexicanos compurgando una pena y otro tanto que enfrentan un proceso legal en libertad.
Luego de la toma de protesta como mandatario estadounidense de Trump, la población migrante en el vecino país, no solo mexicanos sino minorías de todo el mundo se mantienen expectantes ante las primeras determinaciones del también exitoso empresario americano.
Ante ello, esa población captiva, de la cual las autoridades norteamericanas tienen ubicación ya sea en penitenciarias o en sus lugares de residencia serían la primera en ser deportada al considerarlas como nociva para la sociedad norteamericana.
“Sería primero la gente con antecedentes penales, sabemos que las cárceles de migración están a su máximo, por ahí hay gente con antecedentes (penales) con situaciones legales pendientes son más de dos millones de internos, pero a lo que se está diciendo los reos de origen mexicano serían los primeros en deportar”, explicó.
Bock dio a conocer que existe especulación sobre qué tan severa será la deportación masiva prometida durante la campaña electoral del presidente Trump,
“Estamos a la expectativa qué tanto se va a poder actuar en contra y otra que tanto se lo va a permitir el Congreso, es la otra parte pero siendo realistas ahorita hay suficientes herramientas legales, leyes que se han pasado a cárceles o departamentos de ciudades para cumplir su promesa de deportaciones”, indicó.
El representante de la organización de Tamaulipecos radicados en el vecino estado de Texas dio a conocer que han sostenido encuentros y tienen alianzas con Congresistas y Senadores pro migrantes desde hace más de una década, sin embargo reconoció que han sido insuficientes las labores.
Dijo que están enterados de las reuniones que han sostenido Gobernadores fronterizos de México y que están buscando alianzas para sumar esfuerzos, no obstante que de las principales demandas de los mandatarios estatales se encuentra el solicitar recursos económicos para enfrentar las afectaciones que provocaría una deportación masiva.
“Sería un caos en la frontera (mexicana), no se tiene infraestructura para recibir a tanta gente en un corto periodo de tiempo y básicamente se están basando a pedir al Gobierno federal baje más recursos para el tema migratorio y fronterizo”, concluyó.