Cuando inicia la temporada de Súper Bowl, la preferencia del público para disfrutar de los partidos se inclina hacia un exquisito platillo que todos nosotros conocemos: el guacamole. Es del conocimiento del público que mientras inician los juegos de la NFL, se consumen grandes cantidades de comida, pero el preferido en Estados Unidos para acompañar en los partidos es esta salsa de aguacate.
Pero, ante los cambios que han surgido de acuerdo con esta nueva administración en la presidencia de EU, la industria del aguacate podría estar en “aprietos” y posiblemente la próxima temporada sea un Súper Bowl sin guacamole, campeonato que se inaugurará este cinco de febrero.
Donald Trump ha prometido renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), amenazando con nuevos aranceles contra México, el cual abastece más del 80 por ciento del mercado estadounidense del aguacate.
En vísperas del Súper Bowl del año pasado, México exportó una cifra récord de 278 millones de aguacates.
Ahora, los agricultores se encuentran preocupados ante las promesas de Trump quien ha hablado de un arancel del 35 por ciento sobre las importaciones de México, ya que el ahora presidente no especificó si está hablando sólo del área de manufactura.