WASHINGTON, EU febrero 9 (AP) — El presidente Donald Trump ordenó el jueves a su gobierno ampliar sus esfuerzos para combatir la actividad criminal, en la que incluyó a la inmigración ilegal.
Trump firmó tres decretos para desmantelar carteles del crimen trasnacional organizado que operan en territorio estadounidense, reducir los crímenes violentos y diseñar un plan para detener la violencia contra efectivos policiales.
Uno de los decretos ordena al Departamento de Justicia crear una comisión para la reducción del crimen, cuyos miembros deberán diseñar «estrategias para reducir el crimen, incluyendo, en particular, la inmigración ilegal, el narcotráfico y los crímenes violentos».
El portavoz de la Casa Blanca Sean Spicer argumentó que «no podemos reducir el crimen en Estados Unidos sin abordar adicionalmente la inmigración ilegal y las drogas ilegales».
Otra de las medidas buscan asegurar que los organismos del gobierno federal den prioridad máxima y destinen los recursos necesarios para erradicar organizaciones trasnacionales dedicadas al tráfico ilegal de personas, drogas, armas, corrupción, crímenes cibernéticos, fraude, delitos financieros, violación de propiedad intelectual, y al ocultamiento o transferencia de beneficios obtenidos con actividades delictivas.
El decreto estipula identificar si hay fondos deficientes en áreas específicas que dificulten al gobierno federal combatir el crimen organizado y revisar las leyes vigentes, incluyendo las migratorias, para evitar el ingreso a Estados Unidos de extranjeros vinculados a estos grupos.
El documento menciona la formulación de cargos criminales por fraude migratorio y fraude de visas como parte de los esfuerzos adicionales para prevenir el funcionamiento de los grupos criminales.
Activistas defensores de los derechos de los 11 millones de inmigrantes que residen sin autorización en Estados Unidos han cuestionado reiteradamente que las violaciones a las leyes migratorias sean consideradas igual que otros delitos.
Al juramentar a Jeff Sessions como el nuevo secretario de Justicia, Trump dijo que la ceremonia «debe ser vista como un claro mensaje a los pandilleros y narcotraficantes que aterrorizan a gente inocente. Su momento ha terminado. Una nueva era de justicia comienza, y comienza en este momento».
Sessions señaló que «necesitamos un sistema legal de migración, uno que sirva a los intereses de pueblo estadounidense. Eso no es incorrecto. No es inmoral. No es indecente. Necesitamos acabar con esta ilegalidad que amenaza a la seguridad pública».
El congresista republicano Bob Goodlatte, presidente de la comisión de justicia de la cámara baja, expresó su beneplácito por los decretos ante lo que describió como «un flujo continuo de drogas ilícitas y peligrosas hacia Estados Unidos».