Rogelio Rodríguez Mendoza.-
Para deslindar responsabilidades, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) requirió al Ayuntamiento de Río Bravo un informe sobre el accidente registrado el pasado domingo, durante un espectáculo de arrancones, en el cual seis personas resultaron lesionadas.
La diputada priista Copitizi Yesenia Hernández García dijo que el accidente ocurrió debido a la falta de medidas de seguridad y por tanto fue una exhibición que no debió haberse permitido.
Indicó que la Presidencia Municipal de Río Bravo dio un permiso para un desfile de autos solicitado por un club automovilístico, por lo cual pedía el cierre de determinadas de calles.
Sin embargo, justificó, en la solicitud no se especificó que el espectáculo incluía las piruetas efectuadas por los participantes, que terminaron originando el accidente cuando un conductor perdió el control de la unidad y arrolló a varias personas.
Explicó que la demostración efectuada fue algo que no debió realizarse ante la falta de condiciones de seguridad.
“Lamentablemente los arrancones son costumbre arraigada entre la gente de Río Bravo, y no debió haberse efectuado en ese lugar, sino en otro sitio donde hubiera la protección adecuada”, refirió.
Comentó que el club automovilístico organizador del evento ha asumido la responsabilidad y se ha hecho cargo de la atención médica de las personas lesionadas.
Ante los hechos, la Procuraduría General de Justicia del Estado inició una carpeta de investigación, y requirió a la Presidencia Municipal de Río Bravo presente un informe pormenorizado.
El conductor del auto que arrolló a las personas se encuentra prófugo y no se ha presentado para asumir su responsabilidad.
Hernández García insistió en que ocurrió un exceso de confianza y aceptó que el espectáculo no debió haberse permitido.
