CIUDAD DE MÉXICO, febrero 15 (Agencias)
¡No te tortures! Puedes combinar azúcar en tu dieta ¡sin romperla! El portal web mexicano glamour nos da los consejos para conseguirlo.
A veces, las mujeres recurrimos a dietas muy estrictas que, además de que nos limitan a comer una pequeña cantidad de alimentos ¡no son tan efectivas como parecen!
En realidad, podemos darnos el gusto de consumir algunos de nuestros placeres dulces, como postres, y combinar azúcar en nuestra dieta de vez en cuando.
¿CUÁL ES EL SECRETO?
La clave para combinar azúcar adecuadamente consiste en ser moderada y elegir las porciones adecuadas, para no abusar, disfrutar de lo que tanto te gusta ¡y mantener una alimentación balanceada!
CAFÉ Y TÉ
Puedes tomarlos con azúcar, siempre y cuando lo hagas en porciones moderadas. Desde un café de máquina por las mañanas hasta una taza de té.
Puedes consumirlos, sin preocuparte, hasta tres veces por semana.
FRUTA
Las frutas contienen vitaminas ideales para mantenerte sana y bella. ¡Las prisas no son pretexto! Por eso, una forma muy saludable de combinar azúcar sin romper tu dieta es tomar un jugo por las mañanas.
Te recomendamos elegir los que tienen naranja, manzana, papaya, mango o guayaba.
LECHE SABORIZADA
Otra dulce opción que puedes combinar en tu dieta sin romperla, son las leches de sabores, como chocolate, vainilla o fresa.
Consúmelas hasta cinco veces por semana, lo ideal es que las tomes por la mañana ¡para que empieces tu día con mucha energía!
HELADOS
Sabemos que te encantan los postres, ¡y te tenemos una buena noticia! No tienes que olvidarte de ellos para mantener una alimentación balanceada.
¿Nuestra sugerencia? Optar por helados frutales o de yogurt. ¿La porción adecuada? Un vaso mediano o dos chicos a la semana.
BEBIDAS PARA DEPORTISTAS
Si eres una mujer fit y te gusta hacer ejercicio, sabes que es fundamental mantenerte hidratada. Lo ideal para ti es que tomes dos litros de agua todos los días.
También es buena idea recurrir a bebidas diseñadas para deportistas, pues te ayudarán a recuperar los minerales que pierdes al sudar, como calcio, sodio y potasio.