El alto funcionario, quien pidió no ser identificado, dijo que Trump estima que el país se encuentra en un momento en que se puede regularizar la situación de millones de inmigrantes indocumentados mediante una ley en la que republicanos y demócratas hagan concesiones.
Trump estaría dispuesto a apoyar una iniciativa de ley que permita a los inmigrantes que no hayan cometido delitos graves permanecer legalmente en el país sin riesgo de ser deportados, obteniendo un permiso de trabajo y pagando impuestos, pero sin ruta a la ciudadanía.
La exclusión de vías para la ciudadanía, como exigen los demócratas, permitiría que el mandatario y el Partido Republicano evitaran ser acusados de brindar una amnistía a estos inmigrantes.
Una excepción podrían ser los 750 mil jóvenes inmigrantes protegidos hasta ahora por el Programa de Acción Diferida para Llegados en la Infancia (DACA), y conocidos popularmente como «dreamers».
Trump estimaría que su base electoral no vería con malestar una solución de este tipo, que sería producto de una negociación en la que tanto republicanos como demócratas tendrían que hacer concesiones.
“Tiene que haber una negociación. Podría ser bueno, porque la gente está agotada» de debatir uno de los temas más divisorios y que ha enfrentado a las dos facciones políticas en el Congreso en los últimos 10 años, indicó la fuente.
Semanas atrás, Trump reveló su disposición a apoyar una reforma migratoria durante una conversación privada con senadores, uno de los cuales, el demócrata de Virginia del Oeste, Joe Manchin, dijo que Trump estaba “abierto” a esa idea.
Una propuesta de reforma migratoria fue aprobada en 2013 en el Senado con apoyo bipartidista, pero el bloqueo de los republicanos en la Cámara de Representantes impidió que se convirtiera en ley, a pesar del apoyo del entonces presidente Barack Obama.