Para romper el estigma sobre que las muñecas sexuales, son un mero objeto para satisfacer necesidades carnales. La empresa de Sillicon Valley diseñó una muñeca fabricada con un aspecto muy similar al de una mujer de carne y hueso.
El experto en nanotecnología, Sergi Santos, creador de Samantha explicó que fue fabricada de elastómero termoplástico (TPE), un material que tiene un tacto muy parecido al del cuerpo humano. Con medidas de90-55-90, 40 kilos y una larguísima cabellera, esta muñeca ha logrado encantar a más de uno.
La muñeca tiene la capacidad de procesar respuestas tanto sexuales como amorosas, de acuerdo con la opción que se escoja, familiar, romántica o sexual.
«Mi objetivo no es sólo que copulen con Samantha, sino que se enamoren de ella», comentó Santos.
