José del Carmen Perales Rodríguez.-
Las amenazas sobre presuntas masacres a efectuarse en centros educativos, que hasta ahora han resultado falsas, son una muestra del exceso de información a la que tienen acceso los menores por descuido o abandono de parte de los padres, aseguró Santiago Jiménez Zavala.
El Presidente de la Asociación Estatal de Padres de Familia (Asepaf) advirtió que de no aplicar en el hogar estrategias para un mayor acercamiento padres-hijos y viceversa, cada vez habrá más casos de este tipo en que los menores siguen ejemplos que ven en las redes sociales.
“Desafortunadamente en Internet hay muchas cosas que dan ejemplos a los menores sobre cómo hacer determinadas cosas, muchos de los cuales en su curiosidad caen”, señaló.
Respecto a la posibilidad de que puedan hacerse realidad estas amenazas, Jiménez Zavala consideró que son pocos los hogares de clase media para abajo en los que puede haber un arma al alcance de los niños.
“Tener armas en una casa donde vive una familia no es común, al menos en Tamaulipas, menos que el padre las tenga a la vista de sus hijos o que les enseñe su uso, a veces se ve eso pero cuando a los padres les gusta la cacería”, comentó.
Sin embargo no puede generalizarse, porque al menos en este último caso se tata de de niños cuyas familias son de un nivel económico más alto e incluso son menores con mayor coeficiente intelectual, por lo que recalcó la necesidad de mayor diálogo.
“Es falso que la brecha generacional haya ocasionado una ruptura entre padres e hijos, sino que muchas de las veces es la falta de entendimiento lo que lleva a los miembros de la familia a distanciarse por la falta de paciencia por parte de los adultos”.
A eso hay que sumarle, puntualizó Jiménez Zavala, “el creciente número de divorcios, de hijos que no viven ni con la madre ni con el padre, que no conviven con alguno de ellos por el exceso de trabajo, eso no abona a mejorar los ambientes escolares”.