Rebeca Maldonado.-
Cuando una mujer está embarazada, sabemos que todas sus emociones pueden ser percibidas por el bebé. Aunque, aún tenemos muchas dudas acerca de cuánto es que el estado de ánimo de una mamá afecta al feto. Recientemente una investigación por parte de la Universidad de California-Irvine, reveló que las emociones que experimenta una madre y su bebé durante la gestación, pueden traer consecuencias no sólo en el desarrollo del niño sino también durante toda su vida.
Esta investigación, expuso que mientras un bebé está en el vientre, reciben químicos que generan y cambian con los estados emocionales de su mami y que además otros factores como drogas y alcohol pueden traer consecuencias de por vida para el pequeño.
Por ejemplo, si la madre sufre depresión el bebé se apropia de ese sentimiento y le genera angustia, por lo que los especialistas recomiendan a las futuras madres que hagan todo lo posible por mantener la calma cuando este tipo de emociones se apoderan de ellas, dado a la conexión que tienen con su hijo.
Durante dicho estudio, los investigadores Sandman, Davis y Glynn, trabajaron con mujeres que sufrieron depresión antes y después de que sus bebés nacieran y llegaron a la siguiente conclusión:
“Los fetos son participantes activos en su propio desarrollo y están recolectando información para sus propias vidas después de nacer. Se están preparando para el resto de ellas basándose en mensajes o señales que la madre les provee y si, realmente lo que más nos asombró en este estudio fue el comprobar que los bebés podían sentir exactamente eso, el estado psicológico de su mamá”.
Además, también confirmaron que los bebés no solo perciben el estado anímico de su mami, también pueden entender sus pensamientos, que incluso influyen en la forma en el que feto se enfrentará a su desarrollo. Asimismo, sostienen que a partir de los seis meses, la madre genera hormonas que pasan a través de la placenta cuando experimenta alguna emoción, lo que refuerza los lazos con el bebé.
