Muchos de nosotros hoy en día celebramos todas o casi todas las festividades sin conocer el verdadero significado de ellas, incluso desconocemos el origen y su historia.
Por eso te compartimos el origen de la primera celebración del Día de la Madre, y no necesariamente festejaban con flores, regalos o bailables, era más bien una adoración y homenaje.
La primera celebración de la que se tiene constancia en la Antigüedad, del Día de la Madre se la debemos a los Egipcios, una celebración en la que el simbolismo y la mitología se unían para rendir un homenaje a la Gran diosa madre, Isis.
La figura materna ha sido ampliamente venerada en numerosas culturas hasta nuestros días. En la Antigua Grecia ya se rendía homenaje a Rhea, la madre de Zeus, Hades y Poseidón.
Por lo que los griegos celebraban esta tan ansiada fiesta, como veneración a la madre de los dioses a los que adoran. Ya no era sólo la madre de sus dioses, sino que también era considerara la diosa de la fertilidad y la diosa de la madre tierra.
El festejo, se llevaba a cabo en el templo Cibeles, el 15 de marzo y llegaba a durar tres días.
Cada época y a los pasos de los años, las celebraciones han ido transformando su significado, incluso en diferentes países se ha adaptado distintos días de celebración, donde se les ve relacionado con la Iglesia católica o con rituales.
