Pablo Hernández Contreras
CIUDAD MANTE, Tam.- Con el afán de mostrar al Mante en cualquier escaparate y que las inversiones de carácter privado lleguen, los comerciantes locales simplemente ven una economía no estática, sino que va a pique, sin poder tener capacidad de respuesta hasta el momento.
Para el sector comercial, que ha visto los embates de las bajas ventas, aunado a que se ha dado oportunidad a comercio foráneo, la feria y el fin de zafra, representan para ellos más pérdidas que ganancias, lo que los envía a pique sin posibilidades de sanear finanzas.
Juan Álvarez Cedillo, quien desde hace tiempo ha señalado a nombre de este sector de la población y como miembro activo de la Cámara de Comercio en Pequeño, señaló que no es posible aguantar más recesión, que a los nuevos gobiernos no se les ve intención de mejorar las condiciones en las que se encuentra la ciudad y ven con tristeza cómo otros inversores han decidido cerrar negocios, y para quienes son propietarios de locales y establecimientos ya no les rentan.
Aunque en anteriores ocasiones se culpaba más a los políticos que no cimentaron las bases para tener realmente la inversión adecuada, porque se dejaron llevar por parques industriales y las locas ideas de generar riqueza con agave y otras cosas, que alejaron al máximo la idea de la agroindustria que sería en estos momentos uno de los principales detonadores y que incluso hasta vendieron ideas erróneas para poder sacar dinero del gobierno para empresarios locales.
De todo aquello no existen más que “elefantes blancos” como mudos protagonistas de los poderosos que hicieron la obra y no la usaron, y como ejemplos puso el parque industrial, las naves que servirían como incubadoras para maquiladoras, la destiladora de tequila y el rastro TIF.