El actor estadounidense Johnny Depp bromeó con el público del festival musical de Glastonbury, en Gran Bretaña, y desató aplausos y carcajadas cuando aludió al asesinato del presidente Donald Trump.
Llegado al evento anual en el sur de Inglaterra para presentar su película «The Libertine», Depp dijo que Trump «necesita ayuda», agregando que «hay muchos lugares oscuros donde podría ir»
-¿Podemos traer a Trump aquí?, preguntó.
La multitud británica abucheó y rugió: «No».
«Creo que necesita ayuda», dijo Depp, mientras la multitud se reía.
«No estoy insinuando nada. A propósito, esto terminará en la prensa y será horrible, pero ¿cuándo fue la última vez que un actor asesinó a un presidente?», se preguntó ante el público divertido que lo avivaba.
«No me malinterpreten, yo no soy un actor. Miento para vivir», dijo Depp, de 54 años, Y agregó, aludiendo al asesinato de Abraham Lincoln en 1865, de parte del actor John Wilkes Booth: «Pasó tiempo, tal vez llegó el momento».
Hollywood se lleva mal con Trump. Y lo de Depp es un claro ejemplo de ello.
El último episodio de la guerra de Trump con los famosos fue semanas atrás, cuando la comediante Katthy Griffin posó con una cabeza ensangrentada del presidente. La broma fue considerada ofensiva. Y la actriz tuvo que disculparse. Tras ello, fue amenazada de muerte.