José Gregorio Aguilar.-
Cd. Victoria, Tam.- La iniciativa para ampliar en Tamaulipas la legítima defensa de tal manera que también a los choferes del transporte público se les permitiera portar armas reglamentadas para defenderse de la inseguridad no desagrada a los concesionarios sin embargo, si la propuesta se hace “al vapor” puede resultar contraproducente opinó el secretario general de los microbuses verdes, Ramón Hernández Manríquez.
“Por un lado sería ventaja que el operador tuviera con que defenderse en caso de que vaya a ser asaltado; El asunto es medio delicado, yo como secretario general de una organización sería más prudente que esto se pensara bien no es una cosa que pueda tomar una decisión al vapor; es una situación delicada, habría que ver ventajas y desventajas”.
Explicó que los choferes de los microbuses también son víctimas de robos y asaltos pero para aumentar la seguridad en el transporte público se debe valorar los pros y los contras de regular el código penal para que la legítima defensa, en un momento dado, no pueda ser manipulada.
“En un momento determinado pudiera ser contraproducente. Hay gente que pierde el sentido de la ubicación y se puede prestar para malos entendidos o para otro tipo de situaciones diferentes”.
En torno a la polémica que el tema ha desatado en los medios de comunicación, el representante de los microbuses verdes opinó que hay gente malintencionada que puede recurrir a la legítima defensa para lesionar o matar a alguien premeditadamente, por ello, los especialistas tendrían que pensar en evitar que una propuesta que pudiera ser positiva al final solo contribuya a generar más violencia.
“Ha habido antecedentes, no aquí en Victoria, pero ha habido gente que cita a su casa a su rival o a la persona con quien tiene problemas según para platicar y arreglarse pero lo hace para atacarlo o asesinarlo y después ante las autoridades argumenta que esa persona entró a atacar o robar”.