México, 23 Jul (Notimex).- La conducta autoagresiva es un mecanismo al que recurren los jóvenes para regular emociones como el enojo y el miedo, o para reducir el dolor que les causan algunas situaciones.
Aproximadamente 40 por ciento de los adolescentes se autolesionan, y esta conducta es más frecuente en mujeres de entre 10 y 15 años de edad, indicó la especialista en psiquiatría infantil y de la adolescencia de los Servicios de Atención Psiquiátrica de la Secretaría de Salud, Clarisa Villaseñor Robledo.
Los jóvenes, alertó, se cortan partes del cuerpo o se quitan las costras de una herida para lastimarse.
Trastornos emocionales como depresión, estrés post-traumático u obsesivo-compulsivo pueden desencadenar dicho comportamiento, y los síntomas que deben alertar a los familiares son tristeza, irritabilidad, negativismo, desgano por desarrollar actividades, desinterés en el aseo personal, aumento o disminución del apetito, baja autoestima, ideas de culpa y aumento del sueño.
Cuando hay depresión, detalló, el tratamiento es por dos vías: medicamentos y terapias psicoterapéuticas. Se recomiendan sesiones para disminuir la ansiedad, aumentar la autoestima y desarrollar tolerancia a la frustración.
Clarisa Villaseñor expresó que cuatro por ciento de la población adolescente sufre problemas emocionales debido a factores genéticos, familiares, psicológicos y sociales que los hacen proclives a las conductas autolesivas.
Para atender de la mejor manera esas conductas, abundó la experta, es indispensable analizar el ambiente familiar y escolar, así como posibles enfermedades psicopatológicas en la familia.
Consideró esencial poner atención en la conducta de los jóvenes, fomentar, la comunicación y la confianza, además de acercarse a ellos de manera asertiva.