Monterrey, 5 Ago (Notimex).- La dosis de leche establecida para brindarle al recién nacido es a libre demanda, las veces que sean y la cantidad que requiera, aseguró la especialista del Servicio de Neonatología del Hospital Universitario (HU), Erika Ochoa Correa.
La catedrática de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), refirió que del 1 al 7 de agosto se celebra en más de 170 países la Semana Mundial de la Lactancia Materna, para impulsar de esta forma de alimentación natural y a mejorar la salud de los bebés.
“En los primeros días de lactancia, la leche es muy rica en nutrientes y contiene ciertas sustancias que ayudan para la defensa del organismo y la disminución del riesgo de enfermedades infecciosas; es como si le estuviéramos dando una vacuna natural al bebé”, explicó
Refirió que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la leche materna debe darse al pequeño en los primeros seis meses de vida y se recomienda hasta los dos años o más.
Sin embargo, para la neonatóloga , no es una situación estricta, ya que si la madre quiere continuar alimentado a su hijo de esta manera, lo puede seguir haciendo.
Detalló que “no hay una dosis de leche establecida para brindarle al recién nacido, es a libre demanda, las veces que sean y la cantidad que requiera».
Entre los beneficios para el bebé, destaco que la lactancia materna es la nutrición más completa que puede haber, ya que desarrolla el buen funcionamiento del cuerpo y ayuda al desarrollo neurológico.
Igualmente, resaltó, disminuye las enfermedades gastrointestinales y respiratorias, en tanto que en prematuros, reduce el riesgo de enterocolitis – inflamación y dolor del estómago- afección que puede provocar la muerte.
Resaltó que a largo plazo, disminuye el riesgo de obesidad y enfermedades cardiovasculares en la etapa de adolescente y adulto, y esto va depender del estilo de vida y alimentación que lleven en el futuro.
Para la madre, dijo, el beneficio se refleja en que se reduce el riesgo de cáncer de mama y ovario, y disminuye el riesgo de cólicos y estreñimiento.
Manifestó que durante el parto, se contrae el útero más rápido para liberar oxitocina, que es la -hormona que produce la leche, por medio de la lactancia, haciendo que las hemorragias y las complicaciones durante el nacimiento del bebé sean menores.
Ochoa Corre expuso que una madre no debe amamantar cuando padece algún tipo de cáncer y está bajo tratamiento de quimioterapia, en casos de tuberculosis activa o si la es VIH positivo.
Tampoco cuando toman medicamentos para ciertos padecimientos, aunque en estos casos hay una guía para revisar el mismo y ver si es dañino para el bebé, explicó.