CIUDAD DE MÉXICO, agosto 8 (Agencias)
A una semana de que se abra el proceso de renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC), en el pleno de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, las fuerzas políticas fijaron posturas divergentes.
El PRI, PAN, PVEM y Panal dijeron que se presenta la oportunidad de modernizar las reglas vigentes hace 23 años, y la oposición de izquierda, representada por el PRD, Morena y Movimiento Ciudadano deploraron el incumplimiento de las metas prometidas y en cambio el país arrastra una mayor pobreza y desigualdad.
El senador Miguel Barbosa Huerta (PT) propuso que se acuerde con el Gobierno federal que en las negociaciones se asigne un asiento para un representante del Senado de la República, órgano del Congreso que tiene la responsabilidad de ratificar tratados internacionales.
El diputado Jericó Abramo dijo que el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, que en la primera parte del sexenio logró la transformación más profunda en los últimos cien años del país, tiene el equipo y la estrategia para renegociar el TLC. Sostuvo que el tratado vigente desde hace 23 años tiene beneficios para todos, y la oportunidad que se presenta es la de adaptarlo a los nuevos tiempos.
Servicios de Inversión, el tema digital, la propiedad intelectual, el capítulo anticorrupción, así como la armonización del mercado laboral y el aliento a las pequeñas y medianas empresas, reportó el priista, son puntos a tratar en la renegociación. Afirmó que el equipo mexicano va por un TLC “justo y competitivo”.
El senador Juan Carlos Romeroo Hicks (PAN) dijo que se presenta la oportunidad de construir la comunidad de América del Norte, y ante ello, el Senado estará atento y en acompañamiento del equipo negociador mexicano.
Respecto del reto que supone esta renegociación, Romero Hicks dijo que “nadie sabe la estatura que tiene hasta que la vida le pide que se ponga de pie”, y el PAN espera que México avance hacia alcanzar tener una economía competitiva.
Dolores Padierna Luna (PRD) lamentó que los resultados del TLC distan mucho de lo que fue firmado; se prometió crecimiento por arriba de lo que había en la época y se tiene una marcha menor del aparato productivo, que es más importador que exportador.
