El exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, fue llevado al servicio médico del Reclusorio Norte tras sufrir una baja de presión, sentir mareos y nauseas.
El político presentó estos síntomas debido a la huelga de hambre que inició el pasado 17 de agosto.
El exgobernador no aceptó que se le administrara suero pese a ser diagnosticado con hipotensión y deshidratación.
Horas después se dio a conocer que Javier Duarte de Ochoa decidió levantar formalmente la huelga de hambre.
Argumentó que su vida está en riesgo, por lo que a la una de la tarde con 52 minutos dio por terminada su manifestación.
Según los servicios médicos del Reclusorio Norte, Duarte presentó presión arterial baja y decremento en los niveles de glucosa.
Javier Duarte se encuentra de regreso en su estancia ya estabilizado.
Con información de FOROtv
