BONN, Alemania (AP) — Activistas ambientales protestaron frente a una usina a carbón alemana el viernes, al tiempo que Italia se sumó a los países que han fijado plazo para dejar de utilizar el combustible fósil contaminante.
Los manifestantes proyectaron imágenes de habitantes de las islas del Pacífico amenazadas por el cambio climático en la torre de enfriamiento de la usina de Neurath, en el oeste de Alemania y la leyenda «el carbón destruye nuestro futuro».
El acto, organizado por representantes de las naciones insulares del Pacífico y el grupo ambientalista Greenpeace, tuvo lugar mientras diplomáticos de todo el mundo se aprestaban a reunirse en Bonn para discutir la aplicación del acuerdo climático de París.
Aunque se declara líder en la lucha contra el cambio climático, el gobierno alemán se ha negado a poner fecha para iniciar la reducción progresiva del consumo de carbón, que emite grandes cantidades del gas de invernadero dióxido de carbono. El carbón constituye el 40% de la mezcla de combustibles utilizada en Alemania.
En cambio, otros países han fijado fecha: Italia anunció que dejará de usar carbón para generar electricidad a partir de 2025.
La nueva estrategia energética italiana reduce las emisiones en 39% para 2030 y 63% para 2050.
El grupo ambientalista WWF elogió el anuncio, dijo que significaba un paso importante, pero que faltaba tomar las medidas concretas.
«A partir de mañana empezaremos a presionar por la aplicación», dijo Mariagrazia Midulla, jefa de la división de clima y energía de WWF Italia.
El carbón se ha convertido en un tema crucial en las conversaciones en Bonn. El ex vicepresidente estadounidense Al Gore dijo a los delegados que no será fácil abandonar los combustibles fósiles dada la fuerza política del sector, pero que es lo más sensato desde el punto de vista ambiental y financiero.
«Es una locura obligar a los contribuyentes a subsidiar la destrucción de nuestra civilización y desde luego, los cabilderos del carbón y el gas tienen un gran poder político», dijo Gore. «Lo acumularon a lo largo de cien años, tienen influencia sobre los políticos, no solo en mi país sino también en China, en Japón»