Gregorio Aguilar.-
Cd. Victoria, Tam.- El Obispo Antonio González Sánchez, descartó que ante el recrudecimiento de la violencia en algunos municipios de la entidad, pedirá al Estado protección especial para los sacerdotes que conforman la Diócesis de Victoria.
Y subrayó que aunque el clima de inseguridad ha alcanzado a líderes católicos en otras entidades, al menos las parroquias de la zona centro que pertenecen a la Diócesis de Victoria siguen trabajando en forma normal y los sacerdotes, como cualquier ciudadano, cumplen con su oficio siempre encomendando su integridad física a Dios y clamando su protección.
“En el pasado les he comentado a ustedes que no, nosotros sacerdotes no pensamos en pedir alguna vigilancia especial; confiamos en Dios, somos ciudadanos como todos, tenemos un oficio que cumplir pero somos ciudadanos entonces a pesar de lo que ha pasado en otras Diócesis con algunos sacerdotes aquí no tenemos contemplado pedir protección”.
En este contexto, el prelado de la Iglesia Católica consideró que las instituciones encargadas de garantizar el orden público y combatir la violencia en Tamaulipas tendrían que reforzar las acciones específicas en contra de delitos como la extorsión, el secuestro, el robo de vehículos y el domiciliario los cuales, en su apreciación, requieren una estrategia especial.
También aclaró que acabar con la violencia y la inseguridad que se han apoderado de la ciudad y del Estado por muchos años no se pueden acabar de un día para otro, no es algo fácil sino muy complejo.
“Primero quiero comentar que no es tan fácil; entiendo que es complejo acabar con un problema así, pero básicamente creo que es la violencia, la extorsión, el robo domiciliario y a vehículos así como el secuestro ahí es donde habría que implementar según yo”.