CIUDAD DE MÉXICO, noviembre, 26 (Notimex)
Tal y como lo había prometido, Ricky Martín se reencontró con su público mexicano para ofrecer una velada especial, en la que les pidió que dejaran atrás los problemas y preocupaciones para que disfrutaran hasta que la voz se los permitiera.
Con un fuerte grito y miles de celulares listos para grabar, dio inicio su primer concierto en el Zócalo de la Ciudad de México.
Con temas como “This is good”, “Drop it one me”, “Shake your bon bon”, “Sube la adrenalina” dio la bienvenida a su público, con el cual tenía una cita programada desde el pasado 20 de septiembre, pero fue pospuesta por el sismo ocurrido el 19 del mismo mes.
“Buenas noches México, ¿cómo estás? no te pregunto, te lo aseguro”, dijo el boricua, quien deleitó no solo con su voz en el escenario sino también con su impecable imagen, pues salió con traje negro, del que se despojó para lucir una entallada camiseta.
“No tengo palabras para agradecer ni para decir lo que siento de estar aquí ante un público maravilloso. Es una noche muy especial, quiero que nos olvidemos de los problemas y quiero que nos vayamos sin voz de tanto cantar”, apuntó el intérprete.
Con un escenario impresionante de luces y pantallas gigantes, el boricua logró una verdadera fiesta, en la que también deleitó la pupila de hombres y mujeres con sus bailarines.
“Disparo al corazón”, “Tú recuerdo”, “Tal vez”, “Livin’ la vida loca”, “Déjate llevar”, “Asignatura pendiente”, esta última pieza con la que, muy a su estilo, hizo hincapié en su preocupación por la infancia y la libertad.
Y no podían faltar los temas que lo consagraron en México, país que lo acogió en la década de los 90.
“Ahora me gustaría volver al comienzo de mi carrera”, dijo el boricua, quien con su calidez robó el corazón, de los cerca de cien mil espectadores, según datos proporcionados por los organizadores.
Con un popurrí de éxitos como “Te extraño, te olvido y te amo”, “Todo queda en nada”, “Fuego de noche, nieve de día”, “Vuelve” siguió dejando huella en este escenario que pisó por primera vez y al que llegó acompañado por ocho músicos e igual número de bailarines.
El también ex Menudo robó las miradas con las sensuales coreografías, palabras en francés y su elegante traje rojo, con los que invitaba a seguir la fiesta con el tema “Adiós” y “Vente pa’ ca”.
“Ahora empezó la fiesta”, dijo el boricua, quien en el rostro reflejaba el gusto por el reencuentro con su público, que deseaba seguir con él.
Así cobijados por los ritmos latinos sonaron “María” y “La bomba”, mismos con los que se despidió asegurando que había pasado una noche maravillosa.
Sin embargo, ante el clamor regresó para continuar la fiesta que cada vez más encendía los ánimos, por lo que Ricky Martín tuvo que convertirse en cómplice y atender las peticiones.
Por lo que no podían faltar “Pégate”, “La copa de la vida” y “La mordidita” con las que dejó el escenario, no sin antes reiterar el cariño por México, al que regresará en el 2018 para grabar su video en Puerto Vallarta.
“Los quiero mucho; mucha paz y mucha fuerza México”, dijo Ricky Martín, al dejar sus mejores deseos para las fiestas decembrinas.