TAMPA, Florida, EE.UU. (AP) — Un universitario recién graduado acusado de cuatro homicidios que sembraron el terror en un barrio de Tampa no tenía “motivo aparente” y usó la misma arma para matar a personas inocentes cerca de paradas de autobuses, dijo el jefe de policía el miércoles.
El caso fue resuelto finalmente luego de 51 días cuando el sospechoso, Howell Emanuel Donaldson, de 24 años, llevó un arma cargada a su trabajo en un McDonald’s y pidió a una compañera que la sostuviera, dijeron las autoridades.
Los trabajadores denunciaron el arma a un agente de policía que se encontraba en el local, lo que dio lugar a una investigación que vinculó a Donaldson con el arma homicida. Datos en su teléfono celular vincularon al sospechoso con la escena de al menos tres de los crímenes.
“Esta arma era lo que necesitábamos”, dijo el jefe de policía Brian Dugan en una conferencia de prensa a la que asistieron familiares de las víctimas.
El arresto provocó alivio en una comunidad aterrada por un aparente asesino serial que atacó a tres personas en sendas paradas de autobús al atardecer el mes pasado. La policía había distribuido un video de vigilancia en la que aparecía un hombre encapuchado como posible sospechoso, y para Halloween el miedo era tal que la policía acompañaba a los niños que salían a pedir golosinas.
La denuncia que llevó a la policía a detener a Donaldson provino de una compañera de trabajo de éste en el McDonalds de Ybor City, cerca del barrio de Seminole Heights.
Donaldson pidió a una empleada del restaurante que le sostuviera una bolsa con un arma semiautomática cargada el martes por la tarde mientras él iba a un lugar cercano a obtener un préstamo. La empleada habló con su supervisor sobre el arma y éste alertó a un agente de policía que se encontraba en el local.
Cuando Donaldson regresó al restaurante, la policía estaba esperándolo.
Los vecinos y la policía estaban tensos desde el 9 de octubre, cuando Benjamin Mitchell, de 22 años, fue asesinado a tiros. Dos días después fue asesinada Monica Hoffa, de 32 años. Las víctimas siguientes fueron Anthony Naiboa, de 20 años, el 19 de octubre, y Ronald Felton, de 60, el 14 de noviembre.