diciembre 12, 2024
Publicidad

Súper frijoles, esperanza para zonas de África con hambruna

diciembre 4, 2017 | 188 vistas

NWOYA, Uganda (AP) — Richard Opio sumergió una mano dentro de un saco de frijoles rosados, maravillado por los increíbles cambios que han hecho por su familia. Solían cosechar dos sacos de frijoles normales, mientras que ahora cosechan seis.

Los llamados “súper frijoles”, una variedad de rápida maduración y alto rendimiento, forman parte de una campaña de promoción del gobierno de Uganda para alimentar a las zonas que sufren de hambruna en África. También son un paso hacia el objetivo del “súper, súper frijol” que los investigadores esperan crear. Los frijoles son producidos por una selección genética convencional, y no por las polémicas tecnologías de modificación genética.

Los frijoles que cosecha Opio ahora han entusiasmado a los agricultores de esa parte empobrecida de Uganda, que también sufre la reciente llegada de más de un millón de refugiados del vecino Sudán del Sur, devastado por la guerra.

El Centro Internacional para la Agricultura Tropical indicó que los frijoles fueron creados por métodos convencionales para resistir a las condiciones de sequía que pueden conducir a la hambruna a medida que desparece la tierra cultivable.

El grupo opera solo uno de los dos “bancos genéticos” de frijoles del continente, el cual se prevé sea el más afectado por el cambio climático, a pesar que el continente produce menos del 4% de los gases de efecto invernadero del mundo, según el Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas.

Uno de los “bancos genéticos” está ubicado a las afueras de Kampala, capital de Uganda, donde se cultivaron los frijoles que ahora cosecha Opio. El otro banco se encuentra en Malawi, en el sur de África. Los frijoles de los dos bancos se envían a socios en 30 países del continente para que se sigan desarrollando y de esa forma puedan soportar las condiciones locales.

El banco de Uganda tiene guardados cerca de 4.000 tipos de frijoles, incluidos algunos extraídos de Ruanda antes del genocidio de 1994, en el que murieron 800.000 personas y se acabó con muchas de las variedades de frijoles del país.

“Los frijoles tienen que pasar por varias rigurosas pruebas rigurosas antes de ser lanzados al público en general, para asegurarnos de que pueden soportar los distintos problemas y funcionan bien en diferentes condiciones climáticas”, dijo Stanley Nkalubo, científico de legumbres para la Organización Nacional de Investigación Agrícola de Uganda.

Comentarios