ATLANTA (AP) — Habitantes del sur de Estados Unidos corrieron atemorizados a comprar agua y comida al ver que caía nieve a su alrededor, un fenómeno sumamente inusual en esa región.
Según los pronósticos caerá lluvia y nieve en Georgia, Luisiana y Mississippi. En Georgia, por lo menos una decena de escuelas suspendieron las clases en previsión al tiempo invernal.
Expertos y autoridades aseguraron que caerá poca nieve y que ni siquiera se acumulará, pero aun así varios residentes estaban nerviosos.
«Es la primera nevada de la temporada y cada vez que alguien menciona la palabra nieve en el sur, la gente entra en pánico», comentó David Nadler, de la oficina del Servicio Nacional de Meteorología en el sur de Atlanta.
Los expertos indicaron que las temperaturas serían suficientemente templadas como para que cualquier nevada sea breve. Aun así, la noción de que caerían 12 milímetros (media pulgada) de nieve causó inquietud en una región desacostumbrada a esa posibilidad.
Se pronosticaron entre 12 y 25 milímetros de nieve (entre media pulgada y pulgada) de nieve para buena parte del sur de Estados Unidos el viernes. Las autoridades pidieron tomar medidas de precaución en partes de Luisiana, Mississippi, Alabama, Georgia y las Carolinas. Particularmente se alertó a los centros urbanos de Baton Rouge (Luisiana), Hattiesburg (Mississippi) y Birmingham (Alabama).
La primera nevada se detectó en las montañas del norte de Georgia, informó el meteorólogo Kent McMullen. Luego se vio en los suburbios del norte de Atlanta junto con una llovizna en otras partes del estado.
Ya antes del alba estaban mojadas las calles de Atlanta aunque la temperatura rondaba por los 4 grados centígrados (40 grados Fahrenheit), es decir, por encima del punto de congelación. Se preveía nieve y lluvia todo el día pero solo nieve para el viernes a la noche.
«Hay mucha incertidumbre en estos momentos» sobre exactamente dónde y cuándo caerá la nieve y en qué cantidad, admitió Nadler.
Lo más probable es que caiga nieve en la zona limítrofe entre Alabama y Georgia, pasando por Atlanta y luego a Carolina del Sur, cuando empiece a bajar la temperatura. Ya para el atardecer del jueves las temperaturas empezaron a descender en Atlanta, donde empezaba a temblar de frío el público en el estacionamiento del estadio, que aguardaba el partido de fútbol americano entre los Falcons de Atlanta y los Saints de Nueva Orleans.