México, 27 Dic (Notimex).- La población joven está más expuesta a situaciones de riesgo para desarrollar en el futuro Alzheimer Esporádico, debido al sedentarismo, el aislamiento social, mala alimentación y por dormir poco, afirmó el especialista Leo Bayliss Amaya.
El especialista en envejecimiento cognoscitivo y demencia del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía “Manuel Velasco Suárez”, indicó que para mejorar la salud cerebral se deben de realizar una serie de actividades conjuntas.
Detalló que esas actividades deben incluir la práctica de ejercicios cardiovasculares o musculares, así como el aprendizaje de habilidades laborales, educativas o recreativas; en especial, cuando se llega a la tercera edad.
En un comunicado, hizo hincapié en que los hábitos saludables son fundamentales para un funcionamiento cerebral óptimo, así como dormir un promedio de ocho horas por día.
Refirió que actualmente, la población joven le resta importancia a dormir bien por interactuar en las redes sociales y por explorar en Internet.
Bayliss Amaya advirtió que contrario a lo que se difunde en redes sociales, los juegos de agilidad mental en la computadora o aparatos electrónicos no ayudan a la estimulación cognoscitiva.
Informó que, a partir de los 65 años de edad, el riesgo de desarrollar Alzheimer se duplica cada cinco años; es decir, entre el 25 y 50 por ciento de personas que cumplan 85 años, mostrarán signos de la enfermedad.
Aclaró que no todos problemas de memoria, desorientación o lenguaje, están relacionados con esta patología, por lo que es importante que se descarte la presencia de otras enfermedades, pues algunas como la neumonía, pueden provocar confusión entre las personas de la tercera edad.
Señaló que una situación similar se presenta con las infecciones en las vías urinarias, otitis media, dificultad para evacuar o depresión, las cuales pueden ocasionar problemas de lenguaje o cognitivos.
En México, más de 350 mil pacientes están diagnosticados y afecta por igual a hombres y mujeres, principalmente a mayores de 65 años de edad, con una prevalencia de diez por ciento, y un 47 por ciento en personas de 85 años de edad.
El especialista refirió que es necesario educar, principalmente a las nuevas generaciones, de que no todas las personas mayores tendrán Alzheimer, pero, que conforme se envejezca se presentarán cambios en la memoria, pero estos no van a progresar como tal enfermedad.
En el caso del Alzheimer, las primeras señales se observan son la pérdida de memoria, de las habilidades de lenguaje, alteraciones del pensamiento, juicio pobre, desorientación, cambios en el estado de ánimo, conducta y personalidad.