ASUNCIÓN (AP) – El cadáver hallado en el norte de Paraguay pertenece a un agricultor mexicano secuestrado con fines extorsivos en 2015 por la guerrilla Ejército del Pueblo Paraguayo, el día viernes las autoridades.
«Podemos confirmar desde el punto de vista científico que entre el 80% y el 90% de los restos fueron a la persona que fue plagiada», informó en conferencia de prensa el médico forense Pablo Lemir.
Agregó que no se había podido llegar a un 100% de exactitud «que significa que el cuerpo fue enterrado hace cerca de dos años».
Abraham Fehr, de 36 años y miembro de una colonia menonita, fue secuestrado el 8 de agosto de 2015. La guerrilla solicitó entonces un rescate de 500,000 dólares pero el padre de la víctima, del mismo nombre, sostuvo que no poseía esa suma de dinero .
Lemir señaló que no había forma de determinar la causa del fallecimiento sin haberlo asegurado que «no murió por disparos de armas ni por efecto de arma blanca. No encontré rastros de ataques ni de torturas físicas».
El cadáver se encontraba en el interior de una tumba hallada en la hacienda a unos 400 kilómetros al norte de Asunción, en el departamento de Concepción. Un peón del establecimiento había encontrado un panfleto del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) con un mapa que indicaba dónde estaba la fosa.
El fiscal antisecuestro Joel Cazal comentó que «continúan con la tarea de búsqueda de los criminales que tienen en su poder a otros secuestrados», como un policía, un hacendado de 68 años y dos jóvenes menonitas de la misma colonia en la que vivía Fehr.
«El área de los criminales incluye los departamentos de San Pedro y Concepción, muy extensos; eso hace que tengamos dificultades para ubicar el sitio del cautiverio», añadió.
El analista político Alfredo Boccia declaró a The Associated Press que «la muerte de un plagiado en el poder de la guerrilla ocurrió por primera vez. Es un hecho desmoralizante para su familia, la sociedad y el propio gobierno».
Agregó que «a pesar de este trágico momento no hay indicios de que el gobierno se dedica a los cambios radicales en su lucha contra el grupo rebelde, simplemente porque sus fuerzas de seguridad no saben en dónde buscarán a los guerrilleros».
El EPP está señalado por las autoridades como responsable del asesinato de 21 militares, 13 policías y 27 civiles desde 2008.