Philadelphia Eagles conquistaron este domingo su primer Super Bowl de la NFL y lo lograron ante la dinastía más importante del siglo XXI, los New England Patriots, a quienes derrotaron por marcador 41-33.
Se había presupuestado un juego de defensivas, pero estas jamás llegaron al U.S. Bank Stadium de Minnesota, porque este partido se convirtió en el de más yardas combinadas de la historia con 1,155.
La leyenda llamada Tom Brady tuvo una actuación digna de su historia con 505 yardas por aire (récord en SB) y tres anotaciones, pero Nick Foles fue el héroe de la noche y el forjador de su propia historia en Philly, pese a que prácticamente nadie esperaba algo cuando tomó la titularidad por la lesión de Carson Wentz. Esta noche, Foles sumó 373 yardas, tres pases de TD.
La conquista y proeza de Philadelphia estuvo repleta de héroes desconocidos, porque así como su QB no llenaba los reflectores, esta noche aparecieron Corey Clement (4 recepciones y 100 yardas) y Nelson Agholor (9 recepciones y 84 yardas), además de un ex de los Patriots, LeGarrette Blount, con 14 acarreos, 90 yardas y una anotación.
Del lado de los Patriots, prácticamente todo el daño lo lograron vía aérea con tres jugadores por arriba de las 100 yardas: Danny Amendola, Chris Hogan y Rob Gronkoswki, destacando la salida del partido por conmoción de Brandin Cooks.
Así como la era Brady-Belichick ha sido maravillosa para los New England Patriots con cinco anillos de campeones, también cabe acotar que la franquicia empata a los Denver Broncos como la más perdedora en la historia del Super Bowl con cinco descalabros, tres de ellos con los mencionados personajes, pues a la derrota de esta noche contra Eagles se suman las dos ante los New York Giants en 2008 y 2012.