México, 4 Feb (Notimex).- El precandidato de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya Cortés, creó una fundación que en los hechos fue usada para hacer un millonario negocio inmobiliario con constructores amigos, mediante un esquema de triangulación y encubrimiento, reveló la revista Proceso.
En su edición impresa de esta semana, Proceso documenta que el aspirante presidencial creó en Querétaro una fundación que, en lugar de cumplir su objetivo social de “fortalecer la conciencia democrática de los queretanos y su formación cívico-política”, fue usada por el para hacer un millonario negocio.
Señala que dicha asociación civil sirvió para encubrir una complicada triangulación de recursos, en un negocio inmobiliario que les dejó “jugosas” ganancias a empresarios cercanos al panismo queretano y a directivos de esa fundación que creó Anaya, y quien ante Proceso se deslindó de posibles hechos de corrupción.
Proceso refiere que la Fundación por más Humanismo fue creada por Anaya en mayo de 2009, después de renunciar a la secretaría particular del gobernador panista de Querétaro, Francisco Garrido, y es un “fantasma”, porque no existe registro de ninguna actividad pública y la omitió en su declaración 3de3.
El reportaje de Álvaro Delgado revela con base en documentación oficial y financiera que en 2010, Anaya Cortés recibió en la cuenta bancaria de la fundación un depósito de un millón 650 mil pesos del empresario Abraham Jaik Villarreal, dueño de JV Construcciones Civiles.
Con esa cantidad adquirió un terreno donde construyó un edificio que, en 2016, vendió en siete millones 854 mil pesos a Agacel Agregados y Asfaltos, copropiedad de Lorena Jiménez, presidenta de la Coparmex en Querétaro y exsecretaria particular del gobernador panista Francisco Domínguez.
De los 7.8 millones de la venta del edificio, construido en terrenos de alta plusvalía que fueron expropiados a instancias del gobierno de Garrido Patrón, Anaya Cortés le pagó el millón 650 mil pesos a Jaik Villarreal -12 mil más de lo que costó el terreno que inició el negocio-, refiere el semanario.
Pero también le transfirió cuatro millones 909 mil pesos a la empresa de éste, JV Construcciones Civiles, agrega la publicación.
De este dinero, seis millones 559 mil pesos, JV Construcciones Civiles se quedó con tres millones 209 mil pesos y en dos transferencias le depositó tres millones 350 mil pesos a DG Diseño y Construcciones, propiedad de Eduardo de la Guardia Herrera, vocal de la Fundación por más Humanismo, indicó.
Proceso destaca el hecho de que la fundación haya transferido los recursos a JV Construcciones Civiles en vez de hacerlo a DG Diseño y Construcción, cuando el dueño de ésta, De la Guardia, no sólo es vocal de la asociación, sino también, junto con Anaya, apoderado de la cuenta bancaria de la asociación civil que se usó para todos los movimientos financieros.