Arnulfo Mata Huerta.-
Gerardo Reyes Ramírez aún aspira a jugar en la antesala de las Ligas Mayores, en sus inicios como beisbolista se le vio un tiempo jugando en la Liga Pequeña de Beisbol Santa María de Aguayo de esta ciudad Capital, piensa que este año será definitivo para fincar su futuro en la “pelota caliente”, del otro lado del río Bravo, pero de momento disfruta de la serie final de la Liga Invernal Tamaulipeca entre Cardenales y Cachorros.
Nativo de la región naranjera de Santa Engracia, municipio de Hidalgo, Gerardo Reyes Jr. señala que los jóvenes de ahora no deben ponerse límites, sino al contrario: “Pensar en que sí se puede, no importa dónde empieces, lo que vale es cómo se crece, tanto en lo deportivo como en la vida misma”.
De visita en su lugar de origen, donde se da tiempo para acudir en familia al parque deportivo “Santa Engracia” y disfrutar de la serie final de la Liga Invernal Tamaulipeca, Reyes Ramírez, de 24 años, y próximo a cumplir cinco más en el vecino país del norte, opina lo siguiente: “Me da gusto que en mi tierra se juegue a buen nivel, esto habla de que hay material humano, sólo es cuestión de encausarlo de la mejor manera”.
“El Pollo” Reyes, como se le conoce, es egresado del equipo Naranjeros, teniendo como primer mánager a Carlos “El Pato” Reyes y posteriormente, a Ricardo Uribe, el chaval de 24 años declara que está lanzando a una velocidad de cien millas por hora, “de seguir en ascenso mi actual club no dudará en brindarme la confianza como estelar, lo que significaría un gran paso en mi carrera”.
La afición conocedora del deporte rey, recuerda a Gerardo Reyes Jr., como figura en categorías infantiles, principalmente en la Liga Santa María de Aguayo de Victoria; en juvenil representando a Tamaulipas en nacionales y ahora reconocido en el mejor beisbol del mundo.
En sucursales Doble “A” en la nación de las barras y las estrellas, así como Yaquis en el Pacífico, Gerardo Reyes Ramírez ha perfeccionado técnica y carácter, siempre mentalizado de que el éxito se abraza con el respaldo del núcleo familiar, sencillo en su trato, humilde, con la sonrisa flor de labio este chavala de la región naranjera de Santa Engracia es un orgullo para el deporte municipal de Hidalgo.
Deseamos pues que el objetivo de Gerardo se cumpla y así en un futuro próximo tener otro representante de la zona centro en la Gran Carpa, conocimos a este joven lanzador cuando hace ya muchísimos años con el equipo de la Liga Universitaria concertábamos juegos contra el equipo del “Pato” Reyes, Gerardo era un chavalillo en aquel tiempo.
En la actualidad Gerardo ha mejorado mucho su estilo de lanzar, ha participado en las sucursales categoría “A” así como se ha puesto la franela de los Yanquis en la Liga del Pacífico de los Estados Unidos, manifiesta que el éxito se gana con el respaldo de la familia.