Redacción El Diario
Cartagena, Colombia. – La conmovedora escena de un mono capuchino con una perrita criolla, ha cautivado a las redes sociales, después de que los residentes de la ciudad de Cartagena los observaran vagando por el barrio de Olaya Herrera.
Se cree que su relación comenzó cuando el simio apareció en la ciudad, después de haber sido abandonado por quienes lo sacaron de su hábitat natural, y desde su junte, la inusual pareja se volvió inseparable.
La perrita adoptó al mono como si fuera su cachorro y no como una especia de animal diferente, amamantándolo hasta que el mono se acostumbró a ella, colándose de manera increíble en un proceso de maternidad, llegándose a acostumbrar a estar siempre en su lomo.
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La exótica pareja animal llamo la atención de las autoridades locales, quienes trataron de darles cuidado de manera individual, pero estas acciones derivaron a que los dos reaccionaran de manera violenta.
Enrique Zerda, etólogo de la Universidad Nacional, comentó a la radio Caracol, que su vínculo está establecido y que su separación es irreversible, agregando que el simio no sobreviviría la separación, y en caso de querer regresarlo a su hábitat, este podría ser rechazado por los de su especie.
