OTTAWA, Canadá, marzo 28 (Notimex)
El primer ministro Justin Trudeau se mostró “decepcionado” ante la decisión del Papa Francisco de no hacer una disculpa pública y formal a los indígenas canadienses que fueron arrebatados de sus familias y puestos en residencias escolares donde sufrieron abusos.
El capítulo más negro de la historia de Canadá es la existencia a mediados del siglo pasado de residencias escolares administradas por sacerdotes de la Iglesia católica donde fueron internados alrededor de 150 mil niños indígenas, quienes sufrieron todo tipo de abusos, desde malnutrición, golpes y violencia sexual.
Los propios indígenas canadienses sobrevivientes de estas residencias católicas lo llaman “genocidio cultural”. La última residencia escolar católica se cerró en 1996.
En 2015 se integró una Comisión de la Verdad y la Reconciliación que presentó un reporte de 381 páginas con los testimonios de los sobrevivientes con 94 demandas, entre ellas una disculpa pública por parte del Papa Francisco, misma que Justin Trudeau entregó personalmente en su anuencia con el Sumo Pontífice en mayo de 2017.
El arzobispo Lionel Gendron, presidente de la Conferencia Canadiense de Arzobispos Católicos dio a conocer una carta dirigida a los pueblos indígenas de Canadá en donde el Papa Francisco dice que está consciente de las injusticias cometidas contra los indígenas de todo el mundo y que él personalmente no puede dar una disculpa por lo que sucedió en las residencias escolares.
Ante este anuncio Trudeau declaró a la prensa estar “obviamente decepcionado” por la decisión de la Iglesia católica de no disculparse por su rol en las residencias escolares.
Recalcó que tomar responsabilidad de “errores en el pasado y pedir perdón” es fundamental en los valores de los canadienses.
“La reconciliación es no sólo entre el gobierno y los indígenas sino también entre los canadienses no indígenas y los indígenas canadienses”, agregó el primer ministro quien dijo que su gobierno seguirá trabajando con las comunidades e individuos en el camino a la reconciliación.
Por su parte, el legislador Robert-Falcon Ouellette, de origen indígena, afirmó que la Iglesia Católica debe eventualmente disculparse: “Quizá cuando el Papa venga a Canadá, porque creo que vendrá en algún momento, y sería oportuno que lo hiciera, sería muy significativo y curativo para muchos canadienses”.
El diputado por un distrito en Alberta y miembro de las Primera Naciones señaló que muchos indígenas canadienses son católicos.
La Iglesia Católica operó las dos terceras partes de las 130 residencias escolares que albergaron a niños indígenas canadienses entre 1880 y 1996. El gobierno canadiense realizó en 2008 una disculpa formal a los indígenas de las Primeras Naciones por lo que sucedió en las residencias escolares, donde después muchos niños fueron dados en adopción incluso fuera de Canadá.
Las otras iglesias que también operaron estas escuelas indígenas ya han hecho sus respectivas disculpas, como la Iglesia Unida (en 1888), la Iglesia Presbiteriana (en 1994) y la Iglesia Anglicana (en 1993).
La ministra para la Relación de la Corona con los Indígenas, Carolyn Bennett, dijo que el gobierno canadiense seguirá presionando para conseguir la disculpa del máximo dirigente de la Iglesia Católica.