diciembre 15, 2024
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abril 2, 2018 | 163 vistas

CIUDAD DEL VATICANO, abril 1 (Notimex)

En su saludo por la Pascua, ante miles de personas congregadas en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco instó este domingo a encontrar una salida “cuanto antes” a la crisis que afecta a Venezuela además de pedir paz para los principales focos de tensión y violencia en el mundo.

Desde el balcón central de la basílica vaticana, el líder católico pronunció su bendición “urbi et orbi” (a la ciudad y al mundo) y deseó que la resurrección de Jesús lleve esperanza y dignidad a quienes sufren miseria y exclusión como los refugiados, las víctimas del narcotráfico, de la trata de personas y de las distintas formas de esclavitud de la actualidad.

También alzó la voz para que se acabe “el exterminio” que está teniendo lugar en Siria, impulsó las conversaciones en la Península Coreana invitando a las partes a dejar que prevalezca la sabiduría, y pidió “frutos de paz” para Ucrania, Yemen y el Medio Oriente.

Aseguró que los cristianos saben que la resurrección de Cristo es “la verdadera esperanza” capaz de renovar el mundo, marcado por tantas injusticias y violencias, donde hay hambre y falta trabajo.

“Suplicamos frutos de consolación para el pueblo venezolano, el cual -como han escrito sus pastores- vive en una especie de ‘tierra extranjera’ en su propio país”, señaló, hablando en italiano.

“Para que, por la fuerza de la resurrección del señor Jesús, encuentre la vía justa, pacífica y humana para salir cuanto antes de la crisis política y humanitaria que lo oprime, y no falten la acogida y asistencia a cuantos, entre sus hijos, están obligados a abandonar su patria”, añadió.

Más adelante, el Papa imploró “frutos de vida nueva” para aquellos niños que, a causa de las guerras y el hambre, crecen sin esperanza, carentes de educación y de asistencia sanitaria; y también para los ancianos desechados por la cultura egoísta, que descarta a quien no es “productivo”.

A quienes en todo el mundo tienen responsabilidades políticas, Francisco los llamó a respetar siempre la dignidad humana, los invitó a esforzarse con dedicación al servicio del bien común, garantizar el desarrollo y la seguridad para los propios ciudadanos.

Al implorar “frutos de paz” para el mundo entero mencionó a la “martirizada Siria”, cuya población –dijo- está extenuada por una guerra que no tiene fin.

“Que la luz de Cristo resucitado ilumine en esta Pascua las conciencias de todos los responsables políticos y militares, para que se ponga fin inmediatamente al exterminio que se está llevando a cabo”, indicó el pontífice.

“(Que) se respete el derecho humanitario y se proceda a facilitar el acceso a las ayudas que estos hermanos y hermanas nuestros necesitan urgentemente, asegurando al mismo tiempo las condiciones adecuadas para el regreso de los desplazados”, agregó.

Invocó la reconciliación para la Tierra Santa, que en estos días ha sido golpeada por conflictos abiertos que no respetan a los indefensos; también para Yemen y para todo el Medio Oriente, donde exhortó a que el diálogo y el respeto mutuo prevalezcan sobre las divisiones y la violencia.

El Papa Francisco clamó por los cristianos, que sufren frecuentemente abusos y persecuciones, augurando que ellos puedan ser “testigos luminosos del resucitado” y de la victoria del bien sobre el mal.

“Imploramos frutos de diálogo para la península coreana, para que las conversaciones en curso promuevan la armonía y la pacificación de la región”, insistió.

“Que los que tienen responsabilidades directas actúen con sabiduría y discernimiento para promover el bien del pueblo coreano y construir relaciones de confianza en el seno de la comunidad internacional”, subrayó.

Algo similar señaló para Ucrania, donde llamó a que se fortalezcan los pasos en favor de la concordia y se faciliten las iniciativas humanitarias que necesita la población.

Antes de impartir la bendición a todo el mundo, el Papa aseguró que la palabra resurrección va más allá de todo y, con la fuerza del amor de Dios, es capaz de ahuyentar los pecados, lavar las culpas, devolver la inocencia a los caídos, la alegría a los tristes, expulsar el odio, traer la concordia y doblegar a los poderosos.

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