LIMA, Perú, abril 13 (Notimex)
El presidente boliviano Evo Morales resaltó este viernes aquí, en la III Cumbre Empresarial de las Américas, que los actuales tiempos “son de paz y no de muros” y señaló que la “carrera desenfrenada” del consumismo matará al planeta.
En su intervención ante empresarios en un hotel de esta capital, Morales indicó que “América debe ser un ejemplo de integración, de unión, de paz, de solución a los problemas del mundo, son tiempos de paz e integración, no de muros físicos ni legales”.
Valoró que los jefes de Estado y de Gobierno americanos se puedan reunir con los principales directivos de las empresas más importantes de la región y enfatizó que las acciones público-privadas son el camino correcto para alcanzar el desarrollo productivo con justicia social.
Llamó a los empresarios presentes en la cita a incluir en sus conclusiones la necesidad de “dotar de insumos necesarios a los estados en la formulación de políticas públicas para mejorar la vida de las personas”, además de sinergias entre lo público y lo privado.
El Presidente boliviano criticó al modelo económico neoliberal y su “decadencia” que llevó a “empobrecernos a costa del beneficio de pocos bajo el precepto de la competitividad y de las ganancias sin límites”.
Señaló que América es el principal proveedor de insumos para las cadenas de valor para el sector manufacturero a nivel mundial y señaló: “somos parte inicial de la cadena productiva, más no el eslabón final, situación que hay que cambiar”.
Morales acotó que, más allá de las diferencias políticas e ideológicas, “se debe encontrar un equilibrio entre progreso y desarrollo, respetando a la madre Tierra. Si seguimos en esta carrera desenfrenada de consumismo vamos a terminar matando el planeta”.
“La crisis estructural del capitalismo compromete la sobrevivencia misma de la humanidad”, recalcó el gobernante boliviano, quien añadió que “es momento de cambiar, de guiar nuestras acciones para cuidar nuestros suelos, nuestras aguas, nuestra tierra y el entorno donde vivimos”.
Indicó que, empresarios y gobiernos, “debemos encontrar el equilibrio para producir lo necesario para vivir sin depredar la naturaleza, que seamos capaces de encontrar el equilibrio no solo para un crecimiento económico sino también para un mejoramiento social”.
Recordó que América es el “granero del mundo” y que la región tiene un gran potencial para producir alimentos sanos y limpios, bienes de alto valor agregado y producción sin contaminación.
Subrayó los logros de su gobierno, como ser el país sudamericano con mayor crecimiento anual, en torno a un 5.0 por ciento, con un Producto Interno Bruto (PIB) que pasó de nueve mil 500 millones de dólares en 2006 a 37 mil 800 millones de dólares el año pasado.
También citó crecimientos en la inversión pública y en la cantidad de empresas que existen en Bolivia, además de una reducción de la pobreza de 20 puntos porcentuales entre 2006 y 2017 y el término del analfabetismo.