Alfredo Guevara.-
Una tercera parte, de las superficies de sorgo y maíz sembradas en la zona norte de Tamaulipas pudo beneficiarse con la presencia de ligeras precipitaciones pluviales, producto de paso de lo que pudiera considerarse como los últimos frentes fríos, rezagados de la temporada invernal
El secretario de Desarrollo Rural, Ariel Longoria García, comentó que las recientes lluvias beneficiaron a poco más de 350 mil hectáreas sembradas, de las 750 mil que requiere de agua en la región norte de Tamaulipas
Lo mejor de todo, es que los pronósticos indican que las lluvias continuarán en esa región, lo que permitiría mojar la superficie de siembra, y por ende, un mejor desarrollo vegetativo de la planta.
«Tenemos informes de que en San Fernando cayeron algo así como dos pulgadas, muy buenas una zona temporalera de más de 300 mil hectáreas, en Río Bravo igual, casi un pulgada en Valle Hermoso y sigue lloviendo, esperemos que la mancha que se marcaba en el mapa era bastante grande y ojala llueva para las 750 mil hectáreas que están sembradas en la zona norte» puntualizó
Añadió que de una u otra forma, la presencia de precipitaciones pluviales mejora las condiciones en el campo, no obstante a que conjugado con lo elevado de las temperaturas, podría dar origen a la presencia de plagas en esa región.
“Lo mejor de todo es que ya se registraron las primeras precipitaciones pluviales, no es lo que quisiéramos, pero a como estaban las condiciones en el campo, creo que siempre es bueno lo que cae, por muy mínimo que esto sea”, apuntó.
Longoria García admitió que las condiciones para la agricultura y la ganadería no eran las idóneas para el inicio de este año, producto de las bajas temperaturas pero sobre todo por la ausencia de precipitaciones pluviales.
Recordó que la zona más afectada a causa de las bajas temperaturas y la ausencia de lluvias es la de Aldama, González, Estación Manuel y otras, dado que en el norte, de una u otra forma imperaron condiciones más favorables para la siembra de los cultivos.