México, 26 Abr (Notimex).- En la infancia se sueña con ser bombero, policía o futbolista, pero pocas veces se escucha decir «quiero ser astrónomo o astrónoma». Sin embargo, los hallazgos recientes en torno al Universo y el misterio que lo envuelve, ha hecho que la Astronomía sea una profesión atractiva.
En México, prepararse para ser astrónomo da, contrario a lo que puede considerarse, una amplia gama de alternativas profesionales al basarse en una preparación sólida en el campo de las ciencias exactas como física, matemáticas o alguna ingeniería.
Desde su origen hasta su evolución y transformación, el Universo ha sido un misterio para la humanidad y un enigma para muchas generaciones que, por su fascinación por el cielo y las estrellas, se dedican a la astronomía.
Esta pasión llevó a los científicos mexicanos a explorar este campo: Silvia Torres Castilleja, Julieta Fierro y José Franco, quienes realizan actividades importantes de divulgación.
A diferencia de otras naciones como Chile donde existe una carrera universitaria específica en Astronomía, en México no hay programas educativos a nivel licenciatura, pero se invita a los estudiantes a realizar estudios en física, matemáticas, ciencias de la tierra o ingeniería en distintas universidades y en el Instituto Politécnico Nacional.
Luego existe la opción de especializarse en astrofísica, principalmente en dos instituciones mexicanas, a través de un posgrado: el Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE).
La Astrofísica es la parte de la física que estudia los fenómenos que ocurren fuera de nuestro habitat, es la ciencia aplicada al conocimiento del universo.
La comunidad científica de astrónomos en México asciende actualmente a alrededor de 250 personas y si bien no existen proyectos espaciales en astronomía de impacto internacional, la preparación académica de los investigadores y estudiantes dedicados a la astrofísica está al mismo nivel “o mejor” que cualquier otro país.
Silvia Torres Castilleja, presidenta de la Unión Astronómica Internacional, afirmó en entrevista con Notimex que la Astronomía está en su mejor momento, porque los hallazgos recientes entusiasman a las nuevas generaciones, y el acercamiento de ellos a las ciencias exactas y naturales es un motor de desarrollo.
“Los científicos consideramos que si la ciencia entusiasma a los jóvenes, les estamos abriendo una ventana al conocimiento, una ventana que estaba cerrada y que la labor será quitarles el miedo hacia la ciencia para despertarlos al conocimiento, y luego si se dedican a la Astronomía será fantástico”, aseguró la investigadora emérita de la UNAM y destacada por haber sido la primera a nivel nacional en obtener un doctorado en astronomía.
Destacó que en el campo de acción de los profesionales dedicados a las ciencias exactas es muy amplia por los conocimientos que se tienen en áreas como física y matemáticas, por lo que esto debe difundirse en los niños para que conozcan las oportunidades que brindan estas disciplinas.
Informó que la Unión Astronómica Internacional, con sede en París, Francia, y que agrupa a más de 12 mil profesionales de la astronomía en el mundo, prioriza el estímulo de la ciencia y de las disciplinas de ciencias exactas en general.
En México, precisó, se realizan importantes esfuerzos y una muestra es la ya tradicional Noche de estrellas, un programa iniciado en México en 2009, el Año Internacional de la Astronomía, en el que diversas instituciones públicas y privadas, comparten sus conocimientos y pasión por el universo.
Esta actividad se realiza ya en más de 100 sedes de toda la República mexicana, y también en otras ubicadas en varios países de Latinoamérica, por lo que la investigadora destacó el esfuerzo de divulgación que hacen diversas instituciones.
José Franco, coordinador Nacional de la Noche de las Estrellas y coordinador general del Foro Consultivo Científico y Tecnológico, precisó la razón por la que no se ofrece una licenciatura en Astronomía.
«Áreas como la física y las matemáticas son básicas y fundamentales para incursionar en el estudio del universo, pero también te da un horizonte muy amplio para dedicarte, por ejemplo, al cómputo, las ingenierías o la nanotecnología y dedicarte a la investigación o docencia», dijo.
Franco, uno de los científicos mexicanos destacados en este campo, y quien después de obtener la licenciatura en la UNAM realizó estudios de maestría y doctorado en astrofísica en la Universidad de Wisconsin-Madison, rechazó que los “temores” que puedan existir en torno a la física y matemáticas sea un factor que desvíe el interés de los jóvenes para la astronomía.
Actualmente, añadió, estas áreas se relacionan con todas las profesiones y, además, en todos los ámbitos de la vida cotidiana.
Es importante, aseguró, fomentar la curiosidad de los niños y dar continuidad a las diversas actividades de divulgación “porque de esta manera hay una apropiación social de la ciencia, y ese es lo único camino que nos llevará a la sociedad del conocimiento”.
El actual académico del Instituto de Astronomía de la UNAM y promotor de eventos de divulgación como Noche de Estrellas, se refirió a su vocación científica desde niño y es que no se imaginaba en una carrera tradicional.
Las áreas que más le llamaban la atención en aquella época eran física, matemáticas y filosofía, pero como física y matemáticas están en la misma área y filosofía en otra, al tener que optar por una de las dos decidió por físico-matemáticas.
Julieta Fierro, una de las astrónomas más destacadas y cuya área de trabajo ha sido la materia interestelar y el sistema solar, responde a inquietudes profesionales de jóvenes a través de su página electrónica.
La especialista de la UNAM coincide y afirma que para dedicarse a la astronomía se debe estudiar física, la cual permite llegar al campo de la astrofísica, que es en gran parte la ciencia aplicada al estudio de los astros.
Asegura que “no hay reglas precisas” para estudiar astronomía y que “en general, esta ciencia requiere de personas con inteligencia media o superior, con habilidades de abstracción, pasión por la disciplina y dedicación”.
El gran secreto de la educación, reveló la experta, radica en aprender a pensar, una vez que esto se logra, deja de ser tan relevante el sitio donde se haga la licenciatura. «Lo que creo es que uno se debe tomar en serio sus estudios y dedicarles al menos seis horas al día».
Afirma que la mejor escuela para cursar física en México, es “la que a uno le quede más cómoda”. En todos los estados, destaca, frecuentaría sus respectivos centros de investigación y trataría de asociarme como becario, de tal manera de estar cerca de quienes se dedican de manera profesional a la astrofísica.
Recomendó acercarse a los centros de investigación y de difusión que organizan seminarios donde los expertos abordan algún tema de frontera. Es importante asistir a estas conferencias pues es la forma de enterarse de lo que sucede en campos diversos de la astrofísica.
Julieta Fierro compartió que algunos jóvenes que salen a estudiar fuera de México son contratados en el extranjero, lo que demuestra que en el país hay gran talento para la ciencia. En México hay varios institutos que contratan jóvenes con doctorados en astrofísica.
Respecto a lo que sugieren los doctores Silvia Torres, Julieta Fierro y José Franco de la diversidad de actividades que hay en torno a la astronomía en México, el Centro Astronómico Clavius de la Universidad Iberoamericana (UIA) cuenta con un Observatorio Astronómico, espacio abierto para todo el público, donde la ciencia y la afición conviven en perfecta armonía.
Ese espacio, en operación desde 2001, cuenta con telescopios especializados e instrumentos de observación astronómica de tecnología avanzada, además de una terraza para la observación y sala de proyección.
Para el público en general, el Centro ofrece cursos de astronomía observacional, conferencias sobre temas de actualidad, talleres de astrofotografía y de construcción de telescopios, capacitación en el manejo de telescopios, visitas y excursiones a otros observatorios ubicados fuera del área metropolitana e incluso programas en la formación de docentes para la incorporación de la astronomía en su práctica.
Además de Universum, centro de divulgación científica de la máxima casa de estudios, en la zona metropolitana existen diversos grupos de profesionales o aficionados a la astronomía. Entre ellos, la Sociedad Astronómica de México y los clubes de las facultades de Ingeniería y de Ciencias, de la misma UNAM, entre otros.