Dallas, 25 Abr (Notimex).– Texas aplicó hoy la pena de muerte, mediante inyección letal, a un expandillero de origen hispano por disparar en una fiesta de cumpleaños y matar a una niña de cinco años y a su abuela, en abril de 2008 en la comunidad de Fort Worth.
Erick Daniel Dávila, de 31 años, fue declarado muerto a las 18:31 horas de este miércoles (00:31 GMT del jueves) 14 minutos después de recibir la inyección letal en la cámara de la muerte de la Unidad Carcelaria Walls, en Huntsville, Texas.
La ejecución procedió minutos después de que la Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos rechazara la última apelación interpuesta por la defensa de Dávila para tratar de posponer la aplicación de la sentencia.
El expandillero fue sentenciado a la pena de muerte por utilizar el 26 de abril de 2008 un rifle semiautomático para disparar a unas 20 personas, más de una docena de ellas niños que asistían a una fiesta de cumpleaños, provocando la muerte de Annette Stevenson, de 48 años, y de su nieta, Queshawn Stevenson, de cinco años.
De acuerdo con las autoridades, el ataque fue una aparente represalia contra el padre de la niña asesinada, quien tuvo un enfrentamiento previo con Dávila. Otras cuatro personas resultaron heridas en el tiroteo, incluyendo la niña que festejaba su noveno cumpleaños.
La ejecución fue la quinta realizada en Texas en lo que va del año y la novena del 2018 en Estados Unidos.
