LONDRES (AP) — Las bebidas alcohólicas baratas se han vuelto un poco menos baratas en Escocia, el primer país del mundo que les impone precios por unidades mínimas.
A partir del martes, los minoristas deben cobrar al menos 50 peniques (68 centavos de dólar) por unidad, lo que significa unos 70 peniques por una botella de cerveza o 5 libras por una de vino.
La primera ministra Nicola Sturgeon elogió a Escocia por demostrar “suficiente audacia y valor” para aprobar la norma.
Pero una medida que los promotores de la salud pública saludaron con fervor requirió un largo período para su aprobación.
La legislatura escocesa la aprobó en 2012, pero su puesta en vigencia se vio demorada durante seis años por demandas de la Asociación Escocesa del Whisky.
Las autoridades dicen que el abuso de alcohol provoca unos 697 ingresos a los hospitales y 22 muertes por semana.