WELLINGTON, Nueva Zelanda (AP) – Las historias son tan extensas como profundas en el lago. Durante cientos de años, visitantes del Lago Ness, en Escocia, reportaron haber visto un monstruo que muchos creen que el acecha en las profundidades.
La leyenda de «Nessie» se mantuvo pronto sin escondite. Un científico neozelandés liderará un equipo internacional que viajará el próximo mes al lago para tomar muestras de sus turbias aguas y determinar, a través de pruebas de ADN, que las especies viven en ellas.
Neil Gemmell, profesor de la Universidad de Otago, dijo que no creía en la existencia del monstruo, sino que quería tener una ciencia en una aventura que sirviera para divulgar los conocimientos científicos. Además, añadió, sus hijos creen que es una de las cosas más geniales que ha hecho nunca.
Una de las leyendas más extensas sobre Nessie es que trata de un virus de cuello largo que sobrevivió a la extinción de los dinosaurios. Otra teoría apunta que el hábito más famoso del lago es en realidad una esturión o un siluro, también conocido como pez gato, gigante. Muchos creen que los avistamientos son inventados que pueden explicar por troncos flotantes o fuertes vientos.
Según Gemmell, cuando las criaturas se mueven en el agua, dejan tras sí pequeños fragmentos de ADN que avanza de su piel, sus plumas, sus escamas o su orina.
Su equipo tomará 300 muestras de agua de distintos puntos del lago y diferentes profundidades. Después de filtrarán el material orgánico y extraerán el ADN, y se agregará a Gemmell que se secuenciará el uso de la tecnología creada para el proyecto del genoma humano.
Los resultados se compararon con la base de datos de las especies conocidas y las conclusiones de la investigación sobre el conocimiento a finales de año. Lejos de confirmar la existencia de Nessie, los hallazgos obtenidos como la prevalencia de especies invasoras.
