Managua, 31 May (Notimex).- La marcha encabezada por el Movimiento Madres de Abril terminó con al menos cuatro muertos y decenas de heridos luego de que fue atacada por presuntos miembros de la Policía Nacional y fuerzas de choque llamados «turbas».
El ataque ocurrio la tarde de este miércoles cerca de la Universidad Centroamericana (UCA), cuyas autortidades en una nota informativa indicaron que alrededor de cinco mil personas buscaron refugio en sus instalaciones.
La marcha fue una de las dos que vio la capital nicaragüense este miércoles por el Día de la Madre. La segunda llamada «Oración y cantata a las madres» sirvió al presidente Daniel Ortega para cuestionar a sus opositores y refrendar su permanencia en el poder.
El ataque a los participantes en el recorrido encabezado por las progenitoras de varios de los muertos y heridos por las protestas que comenzaron en abril tras reformas al sistema de seguridad social ya canceladas, podría aumentar la tensión en el país centroamericano.
De acuerdo a medios locale y testigos, la multitudinaria manifestación se aproximaba la tarde de este miércoles a la UCA, su punto de llegada, cuando presuntos miembros de la Policía Nacional y fuerzas de choque la atacaron.
El ataque fue hecho con armas de asalto y dejó entre cuatro y cinco muertos, aunque fuentes gubernamentales solo reconocieron el deceso de una persona, con lo que el balance oficial llegó a 16 fallecidos.
Un reporte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos dos semanas atrás había ubicado en 76 a los caídos desde abril, mientras otro informe de Amnistía Internacional habló a principios de esta semana de 83.
En su nota informativa la UCA dijo que en los alrededores de su puerta de ingreso se generó el ataque de los paramilitares, y más de cinco mil personas ingresaron al recinto universitario, mientras otros más huían.
Añadió que hacia las 20:30 horas (2:30 GMT de este jueves) la mayoria de quienes ingresaron a la UCA había podido ser puestos a salvo.
«La UCA, que se sitúa del lado del pueblo en su justa lucha, denuncia este nuevo ataque criminal y exige a las autoridades el cese inmediato de la represión que utiliza fuerzas de choque para asesinar impunemente, amparada en el desgobierno actual», indicó la institución.
De manera prácticamente simultánea, el presidente Ortega encabezaba otra concentración, en la que apareció por primera vez en público desde el 16 de mayo, cuando participó en la instalación del diálogo en Nicaragua, donde fue increpado por los estudiantes.
«Aquí todos nos quedamos», dijo Ortega en el lugar, donde agregó que Nicaragua «no es propiedad de nadie».
Centró su discurso en un llamado a la paz y el diálogo, al recordar los años de dictadura y guerra civil en que «Nicaragua vivió prácticamente de manera continua un duelo, desde los años 1960 hasta el año 1990, cuando finalmente logramos alcanzar los acuerdos de paz».
«Aquí el reto y el desafío que tenemos los nicaragüenses es hacer camino al andar hacia la paz, el camino tiene que llevar hacia la paz», a través de la mesa de diálogo nacional y de diálogos locales en cada población, sostuvo Ortega.