CIUDAD DE MÉXICO, junio 1 (Notimex)
Luego de 18 años de haber salido de su tierra natal, Héctor González Antonio, corresponsal de Grupo Imagen, regresó al Estado de México, pero ahora para su descanso eterno, en su última morada.
Después de más de 20 horas de camino, acompañado de sus familiares y amigos más cercanos, el cuerpo de González Antonio arribó hasta el panteón Jardín Guadalupano en el municipio mexiquense de Ecatepec.
Esto, luego de que el féretro del periodista de 40 años de edad permaneció en una agencia funeraria en la Capital del país, donde compañeros de trabajo y seres queridos, se despidieron por última vez del periodista asesinado en Tamaulipas.
Previo a su arribo a la funeraria, la comitiva que trasladó el cuerpo de González Antonio llegó a CDMX vía Periférico, pasó por Satélite, llegó a Toreo, para después tomar Río San Joaquín hasta la calle de Sullivan.
Durante el sepelio, su madre, Reyna Antonio no pudo contener su emoción y dolor y lamentó el crimen contra su hijo, quien laboraba como corresponsal del periódico Excélsior y de Grupo Imagen, además de ser el director del portal Todo Noticias.
El lunes 28 de mayo, González Antonio salió de la casa de su pareja hacia su domicilio, durante la noche, pero nunca llegó.
Su cuerpo fue encontrado la mañana siguiente en una zona rural de Ciudad Victoria, con visibles huellas de violencia.
Con este crimen, son seis los comunicadores asesinados en lo que va de 2018.
Colegas y organismos internacionales han hecho un llamado a las autoridades correspondientes para conducir una investigación pronta y debida del asesinato, que los resultados sean presentados en un plazo razonable, y se adopten medidas estructurales que puedan generar cambios en las condiciones de trabajo de las y los periodistas mexicanos.