México, 13 Jun (Notimex).- La carencia de recursos humanos e infraestructura especializados, limitan las posibilidades de enfrentar el cáncer en México, por lo que se ha vuelto un problema de salud pública que se agrava con el paso de los años, aseguró el médico oncólogo Enrique Soto Pérez de Celis.
El especialista del Departamento de Geriatría del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ), señaló que los mexicanos hemos adoptado estilos de vida que nos predisponen a padecimientos que antes no teníamos, como el cáncer de colon y mama, que se relacionan con la obesidad.
En las instalaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el médico refirió que el sistema de salud en el país, fue diseñado para enfrentar enfermedades infecto-contagiosas, pero no crónicas y complejas que requieren abordajes multidisciplinarios.
En el Instituto de Investigaciones Biomédicas, Soto Pérez de Celis señaló que las predicciones refieren que la incidencia de cáncer en 2035 aumentará alrededor de 58 por ciento en menores de 65 años, y en adultos mayores el número de casos nuevos se multiplicará en 160 por ciento. “Es un grave problema para el que nos tenemos que preparar”.
En torno al tema se enfrentan retos como la falta de datos epidemiológicos confiables, la carencia de personal de salud, problemas de acceso a la atención médica y deficiencias en investigación y desarrollo, precisó.
A ello, agregó que en nuestro país sólo existen 1.07 oncólogos, contando médicos, quirúrgicos y radioterapeutas, por cada 100 mil habitantes, mientras que en Texas, Estados Unidos, hay 4.5, ejemplificó.
Y es que de acuerdo con el Consejo Mexicano de Oncología, para una población de más de 100 millones, se cuenta con 383 oncólogos médicos, 864 cirujanos oncólogos y 237 radio oncólogos. “En infraestructura también estamos limitados, con poco equipo de radioterapia, aceleradores lineales y unidades de braquiterapia”.
Hasta hace poco, prosiguió el experto, el cáncer se “medía” utilizando estadísticas de mortalidad, registros histopatológicos de los centros de cáncer, y por reportes epidemiológicos. Había necesidad de crear un registro poblacional en la materia, que se concretó en 2016.
Hoy, dijo, las ciudades de Mexicali, La Paz, Campeche, Mérida y Guadalajara, ya registran sus casos, y cuatro más están por integrarse.
En esos lugares, apuntó, se han detectado, en lo que va de 2018, dos mil 329 casos.
Este reto de salud se debe enfrentar con prevención, con sistemas de salud resilientes centrados en enfermedades crónico-degenerativas y la creación de equipos multidisciplinarios, señaló.
Agregó que se debe garantizar el acceso a la atención médica, aumentar la cobertura de todas las neoplasias, generar fondos de protección para personas vulnerables, como indígenas y adultos mayores, y crear conocimiento que influya en la atención que se da a los pacientes, concluyó.