En octubre de 2004, Pablo Víctor Cuchan mató, descuartizó y quemó en el fogón de la casa de sus padres de Ingeniero White a Luciana Moretti, una joven de 15 años que era vecina suya y había sido su novia. Poco más de dos años después, lo condenaron a 18 años de prisión. Pero en 2016 obtuvo la libertad asistida y se instaló en Monte Hermoso, a 100 kilómetros de Bahía Blanca, donde, pese a que fue declarado persona no grata, vive como un vecino más. Desde allí busca reconstruir su red de relaciones personales y recurre a redes sociales para lograrlo.
Su aparición en Tinder, con el nic Pablo37 ya había generado una ola de indignación y advertencia el año pasado, como lo publicó en su momento Clarín. Un año después, Cuchan se sigue mostrando como tal, pero ahora recurre a otra identificación, Vic29, para estrechar vínculos. Redes de mujeres feministas lo advierten por estas horas a través de Twitter y otros canales de comunicación.
“El femicida de Luciana Moretti, Pablo Víctor Cuchan nuevamente en Tinder. Por favor compañeras difundan. En 2004 la descuartizó y quemó su cuerpo en una parrilla”, se lee en una de ellas. “Compañeras que sean de o visiten Monte Hermoso y la zona, por favor, tengan cuidado y difundan”, recomiendan desde otra.
En marzo del año pasado, Cuchan fue acusado de perseguir, insultar y cruzarle el coche a una ex pareja en pleno centro de Monte Hermoso. La abogada de la familia Moretti realizó varias presentaciones ante el Tribunal Criminal Uno, para que volviera a la cárcel por violar una de las condiciones bajo las cuales en 2016 la Justicia le había concedido la excarcelación, pero no lo logró. Tampoco los cientos de adhesiones que logró la consigna abierta en la plataforma Change para que Cuchan fuera otra vez preso.
Aquella condena a 18 años de prisión, que luego fue rebajada a 17, aún no es firme. En ese argumento se basó el tribunal bahiense que, con la opinión dividida de jueces, liberó a Cuchan. También actuó sobre la base de un informe del Servicio Penitenciario Bonaerense que calificó como diez su conducta dentro de las cárceles de Bahía Blanca y Saavedra, donde estuvo preso más de una década.
Con información de: www.lavanguardia.com
