CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Los gobernadores de México ofrecieron el jueves su respaldo al presidente electo Andrés Manuel López Obrador en sus principales propuestas para la seguridad, el recorte de gastos y las relaciones con Estados Unidos.
Manuel Velasco, mandatario del sureño estado de Chiapas y presidente en turno de la Conferencia de Gobernadores, aseguró que López Obrador “tendrá amigas, amigos y aliados” entre los gobernantes estatales en tres retos fundamentales: la nueva estrategia de seguridad, el plan de austeridad republicano y en la defensa de los derechos de los migrantes que están en Estados Unidos, así como en el “complejo proceso de renegociación” comercial con Washington.
El mensaje fue emitido la víspera de que varios miembros del gabinete de Donald Trump, incluido el secretario de Estado Mike Pompeo y el asesor de la Casa Blanca y yerno del presidente, Jared Kushner, visiten México y se reúnan con López Obrador y parte de su equipo.
El mandatario electo, de tendencia izquierdista, aseguró que le garantizaron el apoyo en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte que está ahora en marcha y en “los acuerdos que se puedan llevar a cabo”.
Los gobernadores expresaron sus preocupaciones en torno a la seguridad. Hicieron énfasis en que es necesaria una mayor coordinación entre las corporaciones policiales, y también se refirieron al combate al robo de combustible y a la falta de recursos, dijo López Obrador, quien se comprometió a que todos participen en el proceso de consulta para la elaboración de la estrategia nacional de pacificación del país.
En este sentido, Velasco aseguró que hay “entusiasmo y compromiso” en el proceso de reconciliación. Se abordó también el problema de la drogadicción, y el compromiso fue “tratar todos los temas, no limitarnos en nada”, agregó.
El presidente electo se comprometió a no utilizar instrumentos gubernamentales como “represalia” contra gobernadores no afines a él _por ejemplo, que no se retendrían fondos como forma de “castigo”_, y pidió apoyo a los mandatarios para el plan de descentralización del gobierno federal y para la reducción de las múltiples delegaciones que el poder ejecutivo tiene en cada estado, a veces hasta medio centenar.
“Esto no es posible; tenemos que ahorrar”, afirmó.
Según dijo, habrá una sola coordinación y se ajustará el personal con los funcionarios de más alto nivel.
La necesidad de que se trasladen más recursos a los estados y el combate a la corrupción fueron otros de los temas abordados. Y sobre este último, el mensaje de López Obrador fue contundente y repetitivo.
“Soy perseverante, soy terco, soy necio, ya se me metió en la cabeza que la corrupción es el principal problema de México, es el cáncer que está destruyendo el país y vamos a acabar con la corrupción”, reiteró una vez más. “No piensen que fue discurso de campaña”.
Los únicos gobernadores que faltaron a la cita del jueves fueron el del estado norteño de Nuevo León, el excandidato presidencial Jaime Rodríguez, y el de Jalisco, en el occidente del país.
Al encuentro asistieron Carlos Urzúa, que será el próximo secretario de Hacienda; Olga Sánchez Cordero, que estará al frente de la secretaría de Gobernación, y el futuro jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo.