diciembre 12, 2024
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julio 16, 2018 | 688 vistas

Shalma Castillo.-

Sus estantes, vitrinas y aparadores no se dan abasto para exhibir la mercancía.

Paredes y techo del local hacen lo propio.

Pareciera que en ello se ha detenido el tiempo, pero como reza la voz popular, “al pasó de la carreta, se han acomodado las calabazas”…

El nivel de la clientela, por años, es de diferente estrato social, aunque allá en el lejano 1929, cuando abrió sus puertas, este era un negocio socorrido por hombres y mujeres curtidos por el sol, nacidos y desarrollados en el campo, amantes de la tierra, productores agrícolas que aquí… tenían y siguen teniendo voz.

De ahí su nombre, proveniente de ese linaje ancestral… pese a cualquier inconveniente, La Voz del Campesino sigue ahora más que nunca vigente.

El giro comercial de antaño ha cambiado y lo ha hecho para bien, en sus inicios, era más común encontrar ahí dulces y sombreros…

Hoy es una franca competencia para las grandes firmas locales y regionales, ahí podemos encontrar artículos de ferretería, material eléctrico, pinturas, plomería, talabartería, productos químicos, artes deportivas para caza, tiro y cacería…

Su amplio espacio también ofrece a quien busque asentarse en sus entrañas, equipos de seguridad y artículos para el hogar…

 

EL INICIO DEL EMBLEMÁTICO NEGOCIO

El primero de abril de 1929, Luis Cervantes Aguiar es quien funda La Voz del Campesino.

En aquel entonces Victoria es una ciudad chica y con muy pocos negocios, el comercio aún no tenía un auge importante.

Por eso las personas que habitan en la ciudad, también de otros municipios llegan a surtirse ahí… desde ese tiempo han contado con una clientela muy importante.

Su historia comienza en un local muy pequeño, con vendimia muy distinta a la de ahora; entre dulces finos, galletas y sombreros, es de los artículos y productos en venta de esos años.

Pasando los años el giro comercial cambia completamente, don Luis decide vender herramientas, armería, ropa y calzado, y las familias completas de la zona urbana rural ahí es donde se surten.

Conforme va pasando el tiempo, después de que don Luis fallece, empiezan a vender ferretería, lo que le da un empujón bastante grande a las ventas, ya que es el giro más importante que hasta la actualidad se mantiene.

Desde 1929, La Voz del Campesino se ha ubicado en tres domicilios, su inicio es en el 7 Zaragoza, de ahí se cambia al 8 Juárez y de 1953 a la fecha el 7 Juárez e Hidalgo.

De La Voz del Campesino existen sucursales de una de sus ramas, que viene siendo la armería, son las tiendas Armex donde se venden artículos militares, policiacos, caza y pesca, en Victoria hay tres Armex una a un costado de La Voz del Campesino, la segunda en el diez López Mateos, la tercera en el centro comercial Paseo Aventa y próximamente en Monterrey Nuevo León.

LA VOZ DEL CAMPESINO, LA TIENDA MÁS POPULAR DEL PUEBLO

Como su eslogan lo dice, “La Casa Más Popular de la Región”…

Y sí, pues la fama de La Voz del Campesino llega hasta el grado que la misma competencia los ha recomendado, pues cuando los clientes buscan artículos en otras tiendas y no los encuentran, los comerciantes de esos negocios les dicen que vayan ahí, porque ahí es seguro que lo van a encontrar… ¡venden de todo!

Algunos empleados que tienen muchos años trabajando en este negocio, comparten algunas experiencias que viven con la clientela…

“Hay un señor que viene eventualmente, es de Ciudad Victoria pero vive en Reynosa, y dice que cuando viene a Victoria si no llega a La Voz del Campesino, es como si no vino a Victoria”.

A este negocio han llegado generación tras generación… las familias acostumbran a sus descendientes a visitar ese lugar.

“Otros clientes que llegan acompañados de sus hijos, les cuentan que su papá los traía de chiquitos, y a sus papás, sus abuelos, aquí compran todo lo que ocupan, los clientes se han encariñado con esta tienda porque la sienten muy del pueblo”…

 

EL FUNDADOR, LUIS CERVANTES AGUIAR

A don Luis, quienes lo conocieron lo describen como un hombre íntegro, comerciante brillante de su época, y un gran activista social que se preocupó siempre por el bienestar de su comunidad.

Era una persona con mucha iniciativa, que tomaban mucho en cuenta su opinión los gobernadores para el bien de los ciudadanos.

Fue presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en 1955, en aquel entonces la luz de las lámparas públicas en Victoria es de foco amarillo… y una de las iniciativas de don Luis fue cambiarla por luz mercurial moderna.

Por lo menos, aunque fueran las calles más importantes de la ciudad. Para ello lo habló con el gobernador de aquel entonces y estuvo de acuerdo, las lámparas de la calle Juárez, Morelos e Hidalgo se cambiaron, ese gasto fue una parte por el gobierno del estado, municipal y por los propietarios de negocios.

También fue presidente de la Sociedad Alianza Mutualista Obrera Progresista que era donde había más socios y también presidente de la Unión de Comerciantes e incluso hizo un viaje especial a México para hablar con el presidente de la República de ese entonces, Adolfo Ruiz Cortines, para que se construyera la carretera Soto la Marina y Jaumave.

 

LA VOZ DEL CAMPESINO, MÁS VIVA QUE NUNCA

Hasta ahora, van cuatro generaciones que con ardua labor han mantenido este negocio.

Pues muchos negocios de aquel tiempo ya no existen, se acabaron porque cuando se muere el dueño y los familiares que quedan no le saben al negocio y optan por cerrarlo o venderlo.

Lo contrario a La Voz del Campesino, que sin pensarlo continuaron con el trabajo y esfuerzo de don Luis, pues cerrarlo de la noche a la mañana nunca fue opción.

Los clientes siguen siendo la prioridad, así como cuando estaba don Luis, los campesinos siguen teniendo voz.

Y ahora que hay mucha competencia, no trabajan al cien, trabajan al mil de manera permanente. Ya que como en todo negocio, cuando hay mucho de lo mismo, afecta…

Cuando empezaron a vender ferretería en los años 70s, eran alrededor de unos cinco negocios de ese giro, en la actualidad hay cerca de 300.

El trato personalizado a la clientela y el extenso surtido con el que cuentan, los mantiene vigentes en todos los tiempos.

En La Voz del Campesino encuentran hasta lo que no imaginan entre los más de 15 mil artículos que venden.

“Hace unos años estaba leyendo un artículo en una revista, sobre un negocio muy antiguo y de mucho renombre, diciendo que en ese local encontraban lo inimaginable, que algo que buscaran ahí lo encontraban… decía ‘bueno con decirles que hasta esperma de ballena venden’… y nosotros aquí vendemos esperma de ballena… eso lo utilizan para hacer el porcelanizado, es uno de los ingredientes, cuando lo leí me identifiqué mucho”.

También pueden encontrar desde molcajetes y planchas de carbón, seguro si buscas algo y no lo encuentras, ahí deben tenerlo.

Los trabajadores de este negocio siempre tratan de ser amables con sus clientes, pues los ven como si fueran parte de la familia… muchos de ellos tienen años de ir a adquirir mercancía, y ya hasta los nombres de ellos se saben.

En el negocio tienen una vitrina tipo museo, con artículos viejísimos que se vendían en épocas pasadas, recuerdos de quienes formaron parte de este gran negocio en sus inicios, y por supuesto que imágenes y fotografías del gran fundador Luis Cervantes Aguiar.

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