Redacción El Diario
Santiago, Chile. – Una niña de tres años llamada Almendra fue asesinada por su padrastro, Sebastián Balbontín, de 43 años de edad, en la comunidad chilena de La Florida, ya que sentía celos por ella, porque a diferencia de su hija, ella estaba sana y no tenía capacidades diferentes.
Balbotín declaro sobre el sufrimiento que le hacía pasar a la pequeña. “Lo que explica mi actuar era que sentía celos de ella. Era lo que sentía en contra de Almendra, ya que era una niña sana”, justificó.
De acuerdo a sus declaraciones, la niña se había hecho del baño, por lo que subió con ella para limpiarla mientras la madre de la menor y su hermano de ocho años se quedaron abajo. El hombre la desvistió y comenzó a abusar de ella y tras escuchar su llanto, le hundió la cabeza en el agua tres veces.
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Por el susto, la niña se volvió a hacer del baño, fue entonces que Sebastián se enojó y comenzó a pegarle en el estómago y en el pecho. “Le pegué en reiteradas ocasiones, lo que duró cerca de 15 minutos”, dijo.
Tras llevar a la menor a un hospital de La Florida, el hombre dijo que se había desvanecido al caerse mientras jugaba. Los médicos trataron de reanimarla, sin embargo, no pudieron salvarla. Fueron los mismos médicos los que declararon que tenía hematomas y golpes producidos por una tercera persona.
El sujeto confesó que agredía de la niña desde hace por lo menos tres meses, frecuentemente le hacía daño y la bañaba con agua helada, pero que esta vez se le fue la mano y por ello la pequeña ahora no se recuperó.
La Fiscalía Oriente atribuyo los sucesos como un homicidio calificado y abuso sexual agravado. Este carácter de homicidio se debe a que “la cantidad de golpes, la energía con lo que lo hizo y cómo le metió la cabeza tres veces en el agua corresponde a un ensañamiento”, explicó el fiscal.
Balbotín ya tenía dos denuncias previas de violencia familiar por parte de una pareja anterior en el 2016.