Guadalajara, 26 Jul (Notimex).- Los jóvenes que hoy cuentan con entre 18 y 35 años, conocidos como generación millennials, demandan necesidades completamente distintas a las de sus padres y abuelos, eso ha obligado a que la industria inmobiliaria diseñe nuevos modelos de vivienda.
Estudios diseñados para que viva una sola persona, departamentos que puedan ser adquiridos por roomies, hogares planificados para familias sin hijos o donde la mascota tiene un rol importante, son ejemplos de la personalización que el consumidor millennial demanda.
Estos cambios evidentes en los hábitos de vida de las personas tras la inserción al mercado productivo de millones de jóvenes mejor conocidos como millennials, no tiene precedente en la historia.
Según estudios de Nielsen, el 22 por ciento de la población mundial pertenece a esta generación. En México, se calcula que ese nicho llega al 35 por ciento, razón suficiente para que la industria inmobiliaria planifique sus próximas inversiones.
El objetivo es claro, entender y cubrir las necesidades de este grupo generacional que se calcula que para el año 2020 conformará la mitad de toda la fuerza laboral mundial.
En un comunicado, Eduardo Orozco, Country Manager de Greystar en México, dijo que la industria inmobiliaria a nivel mundial está evolucionando como respuesta a un cambio en las necesidades y prioridades de los consumidores.
Citó que para los padres o abuelos, lo normal era comprar una casa como parte del plan de vida, para ellos implicaba una inversión de largo plazo que sería legado para sus hijos, impensable que esa generación prefiriera rentar. La vivienda además debía ser espaciosa pues las familias eran más numerosas.
Por el contrario, añadió, para los jóvenes que en estos momentos buscan independizarse, formar una familia o que simplemente deben cambiar de ciudad de residencia por el trabajo, las motivaciones son distintas.
“Ellos definitivamente prefieren rentar, los departamentos son los espacios más prácticos, su realización personal no depende de poseer un bien inmueble”, afirmó.
Refirió que este gran cambio en la industria apuesta por la vivienda vertical. En las grandes urbes como Nueva York, Tokyo, Londres o Ciudad de México, esta transformación comenzó años atrás ante la problemática de falta de espacios.
Sin embargo, es gracias a los millennials, que esta tendencia se extiende a ciudades de menor tamaño como Guadalajara, en donde la construcción de condominios se debe más a la adopción de nuevos estilos de vida.
“Stratto Américas, nuestro primer desarrollo propio fuera de Estados Unidos, es un ejemplo claro de las características de una vivienda Millennial”, detalló.
Para los Millennials el uso de la tecnología, de su smartphone y las redes sociales son una necesidad básica. Son la generación de las conexiones inalámbricas.
Cualquier empresa inmobiliaria que desee conquistarlos, debe asegurarse que toda la información se encuentre disponible en línea, que los procesos para aplicar como candidato para rentar un espacio sean ágiles y que incluso no requieran la presencia física del interesado.
Una vez realizado el contrato, la atención de cualquier problemática de mantenimiento debe resolverse a la brevedad e incluso, incluso mediante Apps se puede llevar una administración completa e instantánea del contrato y servicios.
A pesar de ser una generación individualista, les gusta sentirse conectados con el mundo, por lo que siempre elegirán edificios bien ubicados, conectados a los lugares que frecuentan, cercanos a su trabajo y aquí.
Las amenidades juegan un factor importante (alberca con jacuzzi, gimnasio, espacios de co-working, salón de juegos, etc.) pues se convierten en una extensión de valor al espacio rentado, les permite aumentar sus experiencias y crear comunidad.
Por otra parte, detalló, está la generación X con espíritu millennial, la que por cuestiones de trabajo deben realizar cambio de residencia por periodos cortos de tiempo y se ven obligados a adoptar estilos de vida no tradicionales.
Este grupo de ejecutivos enfrentan principalmente dos complicaciones al tratar de buscar un hogar: no contar con aval en la ciudad de nueva residencia y no conseguir contratos con duración menor a un año. “Empresas como Greystar cuentan con opciones adecuadas a estas necesidades, propias de millenials”, reiteró.