julio 27, 2024
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julio 31, 2018 | 134 vistas

Kabul, 31 Jul (Notimex).- Varios milicianos atacaron este martes un edificio gubernamental en la ciudad de Jalalabad, la capital de la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán, y mantienen secuestradas a decenas de personas en el interior del inmueble.

Funcionarios afganos indicaron que se estaba llevando a cabo un ataque coordinado en la ciudad de Jalalabad, capital de la provincia oriental de Nangarhar, reportó el canal de noticias ToloNews.

Zabihullah Zemarai, miembro del consejo provincial, señaló que primero fue un incidente con coche bomba – probablemente un atacante suicida – cerca de un hospital y un centro de salud provincial, seguido por un fuerte intercambio de disparos.

El Departamento de Refugiados y Repatriación también se encuentra en la misma área. Zemarai no pudo confirmar ninguna víctima, pero apunto que se estaba produciendo un intenso tiroteo entre las fuerzas de seguridad afganas y los atacantes.

Attaullah Khogyani, portavoz del gobierno de la provincia de Nangarhar, confirmó a CBS News que un ataque complejo estaba en marcha, lo que parece apuntar a un edificio del Departamento de Refugiados en la ciudad de Jalalabad.

Khogyani afirmó que muchos empleados de la oficina de inmigración habían sido tomados como rehenes por los militantes en Jalalabad, pero la policía no confirmó el informe de inmediato.

Nadie es responsable inmediatamente del ataque, pero tanto los talibanes como la rama del Estado Islámico (EI ) en Afganistán están activos en Nangarhar.

Un testigo de los hechos, identificado con el nombre de Obaidulá, confirmó que el ataque de este martes comenzó cuando un coche negro con tres personas se detuvo en la entrada del Departamento de Refugiados, en Jalalabad

Un hombre armado salió del auto y comenzó a disparar, poco después, otro miliciano hizo estallar los explosivos que llevaba en la entrada del edificio, que está cerca de una zona de tiendas y de oficinas gubernamentales.

Minutos después, el coche negro estalló, dejando a varias personas heridas.

Aunque no está claro que haya una conexión directa, Estado Islámico ha aumentado sus ataques en Afganistán en un momento en el que el gobierno está haciendo llamados a los talibán para que se sumen a un proceso de paz y abandonen las armas tras el alto el fuego de tres días de duración que decretaron y cumplieron en junio, al final del Ramadán.

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