Mauricio Zapata.-
Cd. Victoria, Tam.- El estado de Tamaulipas dejaría de recibir casi 900 millones de pesos anuales en caso de que se eliminen los llamados “gasolinazos”, que en tres años le han dado a la entidad casi tres mil millones de pesos.
De acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2018, Tamaulipas recibirá, durante todo este año, 845.5 millones de pesos por concepto de los incentivos a la venta final de diésel y gasolina, que es el impuesto que ha hecho que el precio del combustible haya aumentado.
En lo que va de este año, Tamaulipas ya recibió poco más de 400 millones de pesos en lo que corresponde al primero y segundo trimestres del año, según el balance del gasto federalizado que publica la Secretaría de Finanzas.
Los incentivos por el IEPS sobre ventas de diésel y gasolina (IIEPS) se constituyen con los nueve onceavos de la recaudación del IEPS sobre ventas finales de diésel y gasolina. Se distribuyen conforme a la participación de cada entidad en el consumo de diésel y gasolina.
Prácticamente esta entidad recibe alrededor de 60 millones de pesos mensuales por ese concepto, que, de acuerdo con la Ley de Ingresos 2018 de Tamaulipas, son reencauzados a “política social”, sin que se especifique de manera detallada el fin de esos recursos.
Durante el año pasado se recibieron por concepto de la venta de gasolinas y diésel 930 millones de pesos, lo que equivale a una tasa superior a lo recaudado durante el 2016, de cerca de cien millones de pesos.
Durante ese año, la entidad obtuvo, por concepto de incentivos por el IEPS sobre ventas de diésel y gasolina (IIEPS) 877.6 millones de pesos, que significó 114 millones de pesos más de los programado, ya que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) del Gobierno federal había estimado en un inicio entregar 763.6 millones de pesos, sin embargo, al final las cifras fueron superiores.